Automotoras afirman que impuesto “verde” recaudará menos de la mitad de lo previsto
Por Marco Gutiérrez y María José Tapia, El Mercurio.
Para este año, Cavem prevé que monto llegará a $21.572 millones, mientras que Dipres estima $46.687 millones:
En el rubro señalan que en el primer trimestre las ventas de vehículos cayeron en unas 20 mil unidades respecto de igual lapso de 2014, lo que implica $32.731 millones menos en IVA. Hasta un tercio de esa baja sería solo por efecto de este nuevo gravamen.
A tres meses de su puesta en marcha, las automotoras siguen disconformes con la implementación del llamado impuesto “verde” que deben pagar todos quienes adquieran un vehículo particular cero kilómetros y que surgió de la reforma tributaria.
Junto con señalar que el gravamen no castiga a las fuentes más contaminantes -como camiones, buses y fuentes fijas-, en el rubro automotor afirman que se trata de un tributo que no conseguirá el propósito recaudatorio. Añaden que el desincentivo que éste implica para los consumidores está dañando las ventas y, por consiguiente, la recaudación de IVA para el fisco.
Según estimaciones de la Cámara Nacional de Comercio Automotriz de Chile (Cavem, gremio que reúne a los concesionarios automotrices), en los tres primeros meses de este año las ventas de vehículos nuevos han disminuido en 20 mil unidades con respecto a igual lapso de 2014, cuando se comercializaron cerca de 87.700 unidades. Esto, añadió la entidad, significa $32.731 millones menos de recaudación de IVA. Ello, a su vez, considera que el precio promedio a público de un automóvil en nuestro mercado es de $10.250.000, lo que implica un IVA de $1.636.555 por unidad.
En Cavem proyectan, asimismo, que la recaudación total del impuesto “verde” este año será de unos $21.572 millones, menos de la mitad de los $46.687 millones contemplados originalmente por la Dirección de Presupuestos, Dipres (ver tabla) en la reforma tributaria.
En enero pasado, el tesorero general de la República, Hernán Frigolett, proyectó que en 2015 se recaudarían unos $60 mil millones por este concepto, basándose en un mercado de cerca de 250 mil vehículos vendidos y con un impuesto promedio en torno a $225 mil.
Pero hace unos días, Frigolett afirmó a “El Mercurio” que este año este gravamen recaudaría unos $22.400 millones, considerando casi 200 mil vehículos comercializados. En los primeros tres meses del ejercicio, los ingresos fiscales por este impuesto sumaron $5.393 millones, correspondientes a pagos realizados por dueños de 48.534 automóviles. A la vez, el tributo promedio llegó a $145 mil.
Cuánto afecta el gravamen
El presidente de Cavem, Carlos Dumay, comentó que el impuesto está afectando principalmente las ventas de vehículos diésel comprados por particulares, ya que si se trata de camionetas para trabajo -si pertenece a una empresa- quedan libres del tributo.
La fórmula para calcular el monto del tributo considera, entre otros, la emisión de óxidos de nitrógeno (NOx). Este es un contaminante donde los diésel no sacan ventaja ante los motores a gasolina.
El gerente general de la concesionaria Inalco, Osvaldo Rivas, señaló que hasta un tercio de las menores ventas de automóviles nuevos se explican por el efecto del impuesto y el desincentivo que implica para los consumidores. El porcentaje restante está ligado al alza de los precios por el incremento del valor del dólar.
Sostuvo que quienes adquieren vehículos más baratos -menos de $4 millones- deben reunir dinero para el pie, que es 20% del valor generalmente, y ahora también deben cancelar el gravamen. Por lo tanto, en varios casos -sostuvo- las personas postergan por un mes la decisión de compra.
Rivas indicó que “lo que hizo el Ejecutivo fue bajar el nivel piso de ventas de la industria”. Agregó que en 2015 se dejarán de comercializar unas 25 mil unidades exclusivamente por el efecto del impuesto “verde”, casi un mes de ventas para el sector.
Carlos Dumay, en tanto, proyectó que este año se venderán 60 mil vehículos menos que en 2014, cuando se transaron cerca de 337.500 unidades.
Esta merma, añadió el presidente de Cavem, implicará que el fisco registrará una menor recaudación de IVA por $98.193 millones.
”El impuesto no será negocio para el fisco. Como mejor se recauda plata es aumentando las ventas; eso sí suma”.
CARLOS DUMAY Presidente de Cavem
$522 mil fue el impuesto promedio pagado por los vehículos diésel en el primer trimestre de este año, mientras que en el caso de los gasolineros el valor llegó a $110 mil.
2016 Ese año los automóviles petroleros pagarían un tributo promedio siete veces superior a los modelos a gasolina y en 2017 sería 10 veces mayor. Actualmente, la diferencia es de casi cinco veces.
Contrabando impacta ingresos por cigarrosMás allá del incremento de ocho veces sobre el impuesto específico y la baja a 30% del tributo ad valorem que estableció la reforma tributaria, la industria tabacalera aportará menos al fisco de lo estimado inicialmente por el Gobierno. Ese es el diagnóstico que al menos realiza el principal actor de la industria, British American Tobacco (BAT) Chile. Según la compañía, si en 2014 el impuesto al tabaco llegó a los $816 mil millones, ahora, con un alza estimada de 18% por la reforma, la recaudación debiera subir a $960 mil millones en 2015.
Según BAT Chile, el incremento en el contrabando haría que esas metas no se cumplan. Hoy, el comercio ilegal de tabaco alcanza al 11%. La matriz de marcas como Kent y Belmont estima que producto de las potenciales reformas regulatorias que se aprobarían este año -tales como prohibición de ingredientes, cajetilla genérica y término de empaques de menos de 20 unidades-, el contrabando llegaría a 20%, impactando a la baja a los recursos para el fisco. Si, sumando impuesto al tabaco e IVA, el grupo proyectaba una recaudación de US$ 2 mil millones, el avance de nueve puntos en el comercio ilegal reduciría la cifra en US$ 400 millones este año.
La compañía ya ha planteado que el incremento en los impuestos ha redundado en un alza en el valor de las cajetillas, impulsando aún más el desarrollo del contrabando. De hecho, BAT Chile ha realizado una serie de incrementos de precio, haciendo que algunas cajetillas se encarezcan en $500 en cinco meses. Actualmente, en la práctica, todas las marcas lícitas están sobre los $2 mil, mientras que -según la firma- hoy se pueden encontrar cajetillas de contrabando a $1.000 promedio. “Hay casos dramáticos en Arica, donde se comercializan a $300, y en donde el 70% de la venta es ilegal”, señalaron.
Venta ilegal
Si a mediados de 2014 el contrabando llegaba al 6%, hoy asciende al 11%.Licores: menos tributos por baja en el consumoLa desaceleración del consumo impactará de manera directa en la recaudación tributaria. En octubre de 2014, el impuesto a los alcoholes se elevó de 15% a 20,5% en el caso del vino y cerveza, y de 27% a 31,5% en relación a los destilados. Ahora, no obstante, esa alza no se reflejaría en un mayor pago de tributos.
“Se prevé que haya una menor recaudación producto de una baja en el consumo ante el menor crecimiento del país”, estima el presidente de la Asociación de Fabricantes y Distribuidores de Licores y Bebidas Espirituosas de Chile (Aflechi), Juan Pablo Solís de Ovando.
Añade: “Al desacelerarse la economía hay una menor demanda de bienes que no son de primera necesidad, tales como las bebidas espirituosas, que tienen un precio promedio superior a los $5 mil”. A ello se suma el incremento que ha experimentado el dólar, elevando el valor de los productos importados, que constituyen en torno a un 50% de los licores comercializados.
El gobierno esperaba recaudar, de manera adicional, $81.343 millones este año, derivados de las mayores cargas impositivas, tanto de las bebidas alcohólicas como analcohólicas. Solís de Ovando estima que en el caso de los productos espirituosos la baja en los ingresos fiscales podría ser de entre 2% y 3%. Este cálculo considera una caída del orden de 5% en las ventas de la industria.
“El volumen no se resiente, sino que las personas optan por productos más económicos, lo que se traduce en una menor recaudación”, subraya. El ejecutivo añade, además, que si bien no hay cifras concretas, sí se percibe un incremento en el contrabando de licores, situación que no se sentía en 2014, lo que también impacta en la recaudación.