Informes de 2014 alertaron respecto de una posible nueva falla en el puente Cau Cau
Por P. Gutiérrez y M. Fernández, El Mercurio.
Diseño original de pieza clave para levantar la estructura fue modificado y esta se soldó sin la precisión exacta:
En la empresa constructora Azvi afirman que, a pesar de los análisis técnicos, estas situaciones “no afectan la vida útil del puente”.
De acuerdo con el contrato, desde el 1 de abril que la empresa constructora Azvi debería estar siendo multada por el Ministerio de Obras Públicas por el atraso en entregar el puente Cau Cau, en Valdivia, el primer viaducto basculante del país.
El proyecto lleva más de año en la polémica por las sucesivas fallas que han ido apareciendo (ver relacionado). Sin embargo, poco después que se supiera que los tableros habían sido colocados al revés, ya varios informes alertaban de posibles anomalías en la obra que aún no han salido a la luz pública.
En una minuta de febrero de 2014, la consultora Zañartu -que asesora la inspección fiscal de la obra- advirtió que Azvi había decidido modificar una pieza clave para levantar los brazos del puente basculante. Se trata de la llamada “rótula de giro”, que es una especie de bisagra metálica que sostiene el brazo de 500 toneladas. En el diseño original, según indica el informe, esta pieza debía ser un solo cuerpo, con una sección incrustada en el hormigón (a modo de “cimiento”) y una especie de “oreja” que sobresale a la superficie, en la cual se sostiene el brazo del puente.
Azvi, para poder construir la obra con más facilidad, cambió el diseño de la pieza, dividiéndola en dos secciones: así, los “cimientos” quedaron separados de la “oreja” y, en vez de ser una sola pieza, optó por soldarlos entre sí para unirlos.
Según el análisis, en marzo de 2013 Zañartu advirtió que “la posibilidad de montar la plaza de apoyo en dos partes, soldando las orejas a la placa horizontal previamente instalada, para de este modo absorber posibles movimientos durante el hormigonado, no es recomendable”.
En el documento de 2014 ya hablan de que la decisión tiene el carácter de “subestándar” y afirman que “cortar las orejas de la rótula fija y posteriormente soldarlas produce una apreciable menor resistencia del conjunto no prevista en el diseño”.
En un segundo informe de marzo de 2014, Zañartu asegura que “el 28 de noviembre (de 2013) el inspector fiscal solicitó que Azvi resolviera técnicamente el subestándar provocado” por esta decisión.
Tres meses más tarde, el inspector fiscal Walter Wilson Rojas escribió un correo electrónico a profesionales de Azvi. “Aún no me resulta claro cuál es la solución definitiva propuesta por Azvi y su constructor en la deformación de las orejas metálicas de la rótula de giro”, expresa. Y añade que las orejas de la bisagra que permite abrir el puente “se abrieron 8 o 9 milímetros” y que “la soldadura de anclaje de las orejas resultó ser deficiente”.
Conocedores del proyecto coinciden en que esto podría afectar la vida útil del mismo. Por lo mismo, el inspector lanzó una advertencia: “Bajo ningún aspecto voy a aceptar que me indiquen, propongan o traten de convencerme de que el sistema funciona bien así”. Al final del e-mail , agrega: “Les recomiendo seriamente que se den cuenta de la gravedad de este tema y que de no haber un análisis global de la situación y una solución específica a cada caso expuesto, se arriesgan a que por libro de obras solicite el reemplazo de todas las piezas metálicas y con eso la programación de obras se va al infinito”.
El gerente general de Azvi, Juan Lacassie, afirma que “jamás se cortó al orejeta”, pero reconoce que la rótula se dividió en dos piezas y que efectivamente se abrieron las orejas en 8 milímetros. Sin embargo, asegura que “las pruebas realizadas confirman que esto no afecta la resistencia de la pieza. Esto fue corroborado por la U. Austral”.
Añade que la modificación se hizo porque “el proyecto era imposible de construir según los planos originales” y que los cambios fueron “aprobados por el MOP”.
Fuentes de Vialidad del MOP afirman que sí era posible construir el puente respetando el diseño original y que la decisión de seccionar la rótula es parte “del sistema constructivo”, cuya autorización no pasa por la cartera.
Las fallas del viaducto6 de enero 2014
Se da a conocer que los tableros del puente fueron colocados al revés, a días de que se iniciara la marcha blanca para su funcionamiento.
26 de marzo 2014
El MOP entrega un presupuesto adicional a Azvi de $1.800 millones, por obras no contempladas en el contrato.
24 de mayo 2014
En una prueba efectuada en el brazo norte del puente, se detecta que una de las piezas de la rótula no operaba correctamente, específicamente los pernos. Esta situación fue informada por el inspector fiscal.
19 de enero 2015
Se descubre que faltaba por instalar el pestillo de anclaje que sujeta los tableros levadizos.
24 de febrero 2015
Se cortó uno de los émbolos en el brazo sur, cuando se realizaban las pruebas de sincronización.