Logran acuerdo sobre manejo del Parque Nacional Rapa Nui
Por Camila Sandoval C., El Mercurio.
Se validará en consulta indígena:
Parte administración conjunta, que luego pasará al pueblo originario.
Tras la firma de un acuerdo preliminar de administración conjunta del Parque Rapa Nui por parte de Conaf y del pueblo originario -lo que se mantendrá hasta que se concrete el traspaso definitivo-, dirigentes del Parlamento rapanuí bajaron las barreras que impedían el acceso a los principales centros arqueológicos de Isla de Pascua, como Tongariki, Orongo, Tahai y Anakena.
Durante un mes, dicho Parlamento controló la entrada de los turistas e impidió que los continentales residentes en el territorio insular pudieran transitar libremente por esos sectores.
La propuesta para la administración definitiva del parque se presentará a más tardar el 4 de mayo en La Moneda. Transcurridos 60 días, se someterá a la consulta indígena.
Con el acuerdo se cerró una agitada y decisiva semana. El alcalde Pedro Edmunds Paoa mantuvo mesas de diálogo casi a diario con el Parlamento y la Gobernación Provincial para que el conflicto terminara pacíficamente.
El flujo de turistas que llegaron a la isla no se vio afectado, luego que el Parlamento, que tomó el control del parque -sin la intervención de Conaf-, liberó el paso a aquellos visitantes que estuvieran con un guía o chofer rapanuí.
Durante esos días no hubo guardaparques, y el organismo dependiente de Agricultura no cobró la entrada habitual a los pasajeros nacionales ($10.000) e internacionales ($30.000).
El alcalde Paoa señaló: “Solicitamos paciencia a la comunidad y pedimos privilegiar el diálogo. Fueron casi cuatro semanas muy difíciles, en que los residentes continentales estuvieron obligados a no salir del pueblo de Hanga Roa. Gracias a Dios, pudimos llegar a un acuerdo entre todas las partes. Desde el lunes (mañana) comenzamos a trabajar en la propuesta final”.
A pesar de la reunión plenaria del martes pasado, donde estuvieron presentes el director ejecutivo de Conaf, Aarón Cavieres, y el representante del Ministerio del Interior, Flavio Candia, donde se evidenció disposición para una coadministración, el Parlamento no se convenció, y se negó en ese momento a bajar las barreras en todos los caminos de la isla.
“No estábamos seguros de algunos detalles del acuerdo. Nuestra idea siempre fue y será proteger nuestros bienes ancestrales. Para nosotros, mantener los controles era una garantía de que el Gobierno cumpliría su palabra, que los territorios ancestrales pasarían a las manos de nuestro pueblo”, señaló Leviante Araki, presidente del Parlamento.
