Javier Hurtado de CChC: “Es elitista decir que no se construya en mi barrio”
Por Carlos González I., La Tercera.
Javier Hurtado, gerente de Estudios de la Cámara Chilena de la Construcción, plantea que la densificación (construir en altura) es la vía para generar una mayor integración entre los distintos estratos sociales en la capital, pero como existe oposición en algunos municipios a construir en altura, los precios del suelo suben, lo que finalmente se traspasa a las personas.
“Los precios promedio de las viviendas en Santiago están creciendo un 12% a 13 % real. ¿Qué te está indicando eso? Que hay un factor distinto al costo de mano de obra, materiales, que está haciendo que encarezca el valor en todo Santiago y ese factor es la escasa oferta, porque cada vez hay más limitaciones a la construcción en altura y a la extensión dentro de Santiago”, dice el experto.
Los mapas de GfK Adimark muestran, por ejemplo, una dispersión del ABC1 en la ciudad ¿qué podrían estar explicando este fenómeno?
Más que explicar, esto confirma una tesis que se ha estado planteando hace harto tiempo: hay demanda de vivienda en sectores consolidados, donde hay buena ubicación, buenos barrios, buena movilidad. Y para que haya oferta en esas zonas la única forma posible que haya oferta, es básicamente densificando para edificar en altura. La única forma de proceder a una integración real es procediendo a la densificación en sectores con buena movilidad y buen urbanismo.
Sin embargo, hemos visto que en los barrios existe oposición cada vez que se quiere levantar un edificio.
Todos los ciudadanos tenemos los mismos derechos, no creo que haya gente que tenga derechos adquiridos sobre nada, es súper elitista el hecho de decir “no quiero que se construya más en mi barrio, porque no quiero que llegue más gente”. Es elitista, porque estás protegiendo un entorno en el que mucha gente desearía vivir. No me cabe duda que barrios como Providencia, Las Condes, Ñuñoa, Vitacura, requieren mucha más densificación, porque son barrios urbanamente apropiados donde la gente quiere vivir.
Si congelas los barrios para que no crezcan, lo que estás haciendo en el fondo es encarecer el barrio, claramente, y empezar a producir una segregación social, porque los que se van quedando son los que pueden soportar el precio de estas casas que son más caras. En cualquier país que se desarrolle, tienes que permitir que cualquier persona pueda entrar a cualquier parte y no pretender que alguien defienda su espacio y que no pase nada en mi entorno.
En este sentido, ¿ve alguna política que apunte a cambiar esto o estamos en punto muerto?
Estamos en un punto muerto. Claramente hoy día el discurso de proteger el barrio para que nadie llegue es un discurso muy propio de muchos alcaldes, ¿por qué? porque sus votos están ahí. No son los que llegan los que votan por un alcalde, son los que están. Entonces el incentivo de proteger a sus votantes es muy alto, lo vimos en Providencia, en el centro de Santiago, en Vitacura, en varios barrios hemos visto que la disposición comunal es a congelar y a no crecer más, protegiendo a los actuales residentes y no importando que hay otra gente que le pudiera interesar vivir ahí.