Santiago sufrió una preemergencia, pero el Gobierno no decretó medidas

contaminacion atmosferica santiagoPor Manuel Valencia, El Mercurio.

Medio Ambiente la atribuyó a la congestión y al mayor uso de estufas:

Según expertos, el humo que emanaba del fuego para los asados el día del partido entre Chile y Ecuador influyó en la deficiente calidad del aire. Criticaron a las autoridades por no declarar alerta a tiempo.  

Si el plan de alertas sanitarias ambientales hubiese funcionado correctamente en Santiago, ayer las autoridades deberían haber restringido la circulación de unos 300 mil vehículos catalíticos, paralizado 1.350 industrias y prohibido encender estufas a leña. Sin embargo, nada de eso se hizo, y ayer la capital vivió un día de preemergencia, con una crítica calidad del aire durante buena parte de la jornada.

El episodio crítico fue confirmado por las estaciones de monitoreo de Pudahuel y Cerro Navia. Esta última pasó de marcar 70 ug/m {+3} (microgramos de contaminante por metro cúbico) a 266 ug/m {+3} a las 20:00 horas del jueves.

El intendente de la Región Metropolitana, Claudio Orrego, argumentó que ese día, producto del partido entre Chile y Ecuador, se generaron condiciones anómalas marcadas por la gran actividad y congestión vehicular “que hicieron variar radicalmente el horario punta de la contaminación”. De hecho, la máxima concentración ocurrió tres horas antes de lo habitual.

Orrego admitió que el sistema que monitorea la calidad del aire fue incapaz de predecir que Cerro Navia llegaría a un nivel de preemergencia.

Patricio Pérez, especialista en contaminación atmosférica de la Universidad de Santiago, advierte que lo sucedido es preocupante. “Las condiciones de ventilación estaban regulares. Si al menos se hubiese decretado una medida de alerta, se habrían prohibido las estufas a leña, y eso habría ayudado. También se pudo prevenir a la población desde primera hora en la mañana para que no se expusieran a la mala calidad del aire o no hubiese hecho deportes”, explica.

Su opinión es compartida por el especialista en calidad del aire de la Universidad Católica Héctor Jorquera.

A su juicio, el episodio crítico constatado muestra el peso que tiene el transporte como agente contaminante.

Pero además hace ver que con la Copa América “se van a repetir estos mismos factores de congestión, asados y estufas que no se dispersan en la madrugada por la falta de ventilación. Hay un problema con el horario de los partidos, además que son de noche, cuando se acumulan los contaminantes. Esto puede ser peligroso, porque los deportistas de alto nivel en la Copa América inhalan entre tres y cuatro veces la cantidad de oxígeno de una persona que va caminando y, con ello, la misma dosis adicional de contaminantes”.

“Se pudo prevenir a la población desde primera hora en la mañana para que no se expusiera a la mala calidad del aire o no hubiese hecho deportes”.
PATRICIO PÉREZ
ESPECIALISTA EN CONTAMINACIÓN DEL AIRE DE LA U. DE SANTIAGO