Columna “El observador urbano”: Una Nave en Santiago Poniente
Por Miguel Laborde, El Mercurio.
A veces pasan cosas improbables en esta ciudad. Y no creo que sea casualidad el que esto suceda, tantas veces, en el histórico barrio Yungay. Como el valle del Maule en la escala del territorio, este sector tiene algo de símbolo, o de epicentro.
La Peluquería Francesa fue la apuesta inicial. Cuando todo pareció oscurecerse por unas torres residenciales gigantescas, capaces de hundir media manzana, apareció un inversionista patrimonial. Con el prestigio de generaciones de peluqueros -camino a cumplir los 150 años-, intacto el mobiliario de 1925, un descendiente emprendedor, Cristián Lavaud, buscó un socio para conservar el local e ir sumando ofertas en la misma esquina. Se agregó el Restaurante Patrimonial Boulevard Lavaud -donde las mesas están en el salón y cada habitación es un privado-, se sumó la compra y venta de antigüedades que son parte de su decoración en “Los Coleccionistas”, vino el almacén clásico ambientado como hace un siglo, todo en casas adyacentes, y ahora agregan otra casa más para dotar al restaurante de una amplia cocina moderna.
Qué buen nombre el de esa esquina, Libertad con Compañía… Si lo de los Lavaud ocupa las casas del nororiente, su ejemplo sedujo a un matrimonio amigo que hace unos meses compró la mansión del suroriente, donde se proyecta otro emprendimiento. En el ángulo surponiente, el de la gran casa roja que es propiedad de un español, se estudia la apertura de un restaurante que tendrá gastronomía de ese mismo origen.
Lo que está casi listo, para inaugurarse en pocas semanas más, es el centro cultural Nave, en la cuarta de las esquinas, la norponiente. Ese verdadero edificio de época, de baja altura extensa, está siendo reciclado siguiendo un proyecto del destacado arquitecto Smiljan Radic, para acoger una sala de espectáculos de 750 metros cuadrados, salas multiuso y una enorme terraza para eventos en toda la azotea, la que entregará una panorámica de todo el barrio Yungay. Con acceso por calle Libertad hay un pasaje con casas, también recicladas por Radic, las que permitirán recibir a nueve artistas en residencia mensualmente, otro programa de este centro para “la investigación y la creación de las Artes Vivas contemporáneas”: música, danza, performances, teatro, y todas sus combinaciones. La elección de lugar no es casual; parte de los objetivos de la Nave es ser un espacio de encuentro de artistas, misión más factible en medio de una comunidad donde habitan numerosos creadores.
Esta clase de inversiones son los que efectivamente mantienen vivos a los barrios, las que financian el reciclaje de la arquitectura patrimonial y modernizan las instalaciones sin entrar a demoler. Incluso, al poniente del nuevo centro Nave, adyacentes, hay unas casas semiderruidas que, abandonadas en el presente, de sumarse con otra oferta potenciarían aún más este polo mayor del barrio Yungay; en Libertad y en Compañía, en un sector que, desde el año 2009, es Zona Típica.
Libertad con CompañíaLo que está casi listo, para inaugurarse en pocas semanas más, es el centro cultural Nave, en la esquina norponiente de esa intersección.