La resurrección de los ferrocarriles internacionales de Arica
Por Ramón Vásquez, La Tercera.
Es la única región de Chile con dos trazados de tren hacia el extranjero: La Paz y Tacna. El primero retomará funciones durante 2016 y el segundo lo hará dentro de pocas semanas.
La condición fronteriza de Arica y Parinacota convirtió a esta región en la única de Chile en contar con dos ferrocarriles internacionales: el convoy Arica-La Paz y el Arica-Tacna.
Ambos fueron el motor del desarrollo económico, social y cultural de la ciudad del extremo norte, hasta que por diversos motivos dejaron de funcionar.
El que une al país con Bolivia cerró hace 10 años, tras perder rentabilidad frente a la preferencia de los empresarios bolivianos por trasladar sus cargas desde y hacia el puerto ariqueño en camiones, medio que se impuso como más barato y rápido.
Además, las lluvias estivales que se registran en la zona generaban daños frecuentes en la vía férrea.
En tanto, el tren Arica-Tacna, administrado por Perú, dejó de funcionar en 2012, luego de que el único vagón que funcionaba hasta esa fecha sufriera un desperfecto mecánico. Las autoridades del vecino país anunciaron que no contaban con recursos para repararlo, declarando la empresa en quiebra.
Sin embargo, por motivos económicos y políticos, ambos ferrocarriles están cerca de reactivarse. El Arica-La Paz retomará sus funciones en 2016, mientras que el Arica-Tacna “se encuentra cien por ciento habilitado y será reinaugurado a fines de junio o durante el próximo mes”, anunció el gerente de Desarrollo Económico del Gobierno Regional de Tacna (GRT), Kílber García.
El Ferrocarril Arica-La Paz comenzó a construirse en 1906 y fue inaugurado en 1913. La inversión y mantenimiento le correspondió a Chile, como parte del Tratado de Paz y Amistad de 1904, en el que nuestro país se comprometió a asegurar el libre tránsito de cargas de Bolivia hacia el Pacífico. En 1928, Chile comenzó a administrar sólo el tramo correspondiente al territorio nacional, mientras que el país altiplánico se hizo cargo de su parte de la vía.
“El desarrollo de Arica a mitad del siglo pasado es gracias al ferrocarril (Arica-La Paz). Se construyeron colegios, viviendas para las familias de los trabajadores y había servicios de salud. Gracias al ferrocarril, la ciudad tuvo agua potable, electricidad y alcantarillados”, explicó Luis Aguirre, el presidente de la Asociación de Ferroviarios Jubilados y Pensionados de Arica.
En 2013, el presidente de Bolivia, Evo Morales, denunció que Chile no cumplía con el tratado de 1904, luego que el tren llevara siete años sin funcionamiento.
Ese mismo año se celebraba el centenario del ferrocarril, por lo que el ex Presidente Sebastián Piñera viajó a Arica y realizó un recorrido por los 206 kilómetros chilenos de la vía, con un vagón traído de Antofagasta, para demostrar que sí se estaba cumpliendo con el tratado.
El ex mandatario anunció, entonces, la restauración del ferrocarril, a cargo de EFE. Así, en agosto de 2013, se publicitó el traslado de vagones de pasajeros del ramal Talca-Constitución. Sin embargo, éstos finalmente no llegaron a Arica porque la iniciativa aparentemente violaba la Ley de Monumentos Nacionales.
En 2014, el tramo chileno de la vía estaba completamente habilitado, pero sufrió desperfectos tras el terremoto 8,2 grados Richter del 1 de abril del año pasado. Según informaron en EFE, ya se reparó completamente la ruta y se realizaron pruebas con vagones traídos de Atacama.
El ferrocarril, no obstante, cuenta con dos locomotoras y se estima que en 2016 estará operativo a lo largo de todo el tramo. La inversión total de su rehabilitación supera los $ 4.500 millones, los que serán financiados en parte por el Plan Especial del Zonas Extremas.
“Lo principal es remodelar la estación que está en el centro de la ciudad y que es un Monumento Nacional. También hay recursos para mejorar las vías y otras estaciones”, explicó Héctor Donoso, gerente del Plan en Arica.
El Ferrocarril Arica-Tacna, en tanto, fue construido en 1856 por el estado peruano. Tras el Tratado de Lima de 1929, que definió que Tacna volvía a ser territorio de Perú y Arica tomaría la jurisdicción chilena, el tren siguió siendo administrado por el país vecino. Perú, según se informó, invirtió cerca de $ 4.500 millones en su restauración. Se trata de un autovagón con capacidad para 50 pasajeros, que realizarán dos viajes ida y vuelta al día. “Tendrá la estructura de los primeros vagones que tuvo el tren, porque la idea es que sea turístico, muy tradicional”, explicó la directora regional de turismo de Tacna, Carmela Correa.
El costo del pasaje será de $ 3.000. El tren tardará una hora en recorrer el trazado de 60 kilómetros, de los cuales cerca de 20 están en territorio chileno.