¿Cómo se puede medir el bienestar de los habitantes respecto a sus comunidades? El caso de Santa Mónica

“The Wellbeing Project” es una iniciativa diseñada para la ciudad de Santa Mónica (EE.UU.) que en 2013 fue seleccionada para el “Desafío Alcaldes” que cada año realiza la fundación Bloomberg Philanthropies. Este desafío se basa en convocar a los gobiernos de las ciudades de Estados Unidos y Europa para que postulen proyectos innovadores y de carácter social que permitan solucionar algún problema de una comunidad.

En cada selección, la organización elige diez proyectos -5 estadounidenses y 5 europeos- y los financia: US$5 millones para el primer lugar en cada región y US$1 millón para los cuatro proyectos destacados de cada una. En el caso de Santa Mónica, el gobierno local recibió US$1 millón para realizar el proyecto.

La propuesta que presentó el gobierno se basa en que identificó que las mediciones que tenía para conocer el impacto de sus políticas públicas solo le permitía obtener los resultados según indicadores económicos. No obstante, no existía una metodología para estar al tanto del bienestar de los habitantes respecto a sus comunidades ni cómo las comunidades repercuten en el bienestar de los habitantes.

¿Cómo solucionó esto? Acá te contamos sobre el proyecto y sus resultados.

Proyecto y factores

Fue por este motivo que la ciudad propuso solucionar este déficit mediante la elaboración de un índice que a través de la medición y monitoreo de cinco indicadores permite conocer qué es lo que hace prosperar a una ciudad teniendo en cuenta el bienestar de los habitantes y la relación con sus comunidades.

El desarrollo del proyecto se le encargó a investigadores de Rand Corporation, un centro dedicado a elaborar soluciones a problemas presentes en las comunidades, y a la Fundación Nueva Economía (NEF), una organización que estudia el bienestar, formula políticas públicas y se dedica a la planificación urbana.

Además, contó con un panel de expertos integrado por miembros del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, del Centro de Inteligencia Emocional de la Universidad de Yale, de la Universidad de Columbia Británica y de la fundación Bloomberg Philanthropie, entre otras instituciones.

En conjunto definieron que las cinco dimensiones del índice serían el aprendizaje, la comunidad, el entorno, las oportunidades económicas y la salud, las que a su vez les permitirían medir 100 temas. Durante el año pasado midieron estos factores a través de los datos que tenían los departamentos de la ciudad y una encuesta a 2.200 residentes, los que fueron clasificados según edad, etnia, género y geografía.

Resultados por dimensiones

El informe final fue publicado este año y arrojó ciertos porcentajes que se alejaban de la percepción que tenía el gobierno local sobre ciertos temas.

En Aprendizaje por ejemplo, dimensión que consideró los conocimientos obtenidos dentro y fuera de una sala de clases en relación al crecimiento personal, el desarrollo y los desafíos, los investigadores obtuvieron que un 72% siente que la ciudad les ofrece las oportunidades artísticas y culturales que quieren.

No obstante, cuando se evaluaron las oportunidades para aprender, solo un 32% se siente emocionalmente preparado, un 31% se siente psicológicamente listo y un 24% se siente socialmente preparado.

En la dimensión Comunidad fue posible constatar un hecho que se veía como muy positivo y que es que en Santa Mónica hay una alta tasa de votantes con un 80 por ciento de la población. Sin embargo, el índice demostró que solo un 29% cree que su voto repercute en las decisiones de la ciudad.

Además, solo un 56% reconoce que puede contar con sus vecinos, una cifra muy por debajo del 80% que tiene de promedio este mismo tema a nivel nacional.

En Entorno, que engloba el ambiente físico y social según las condiciones naturales y las ocasionadas por el hombre, se obtuvo que la movilidad y el transporte son dos temas que generan mayor preocupación entre los habitantes y que fueron más mencionados al momento de ofrecer una idea sobre cómo mejorar el bienestar en la ciudad.

Esta situación queda demostrada en que un 70% de los residentes se traslada solo en un auto para ir al trabajo, a pesar que un 66% reconoció que vive a 5 minutos a pie de bienes y servicios. Pero, la situación parece estar cambiando de a poco hacia una movilidad sustentable, ya que entre 2010 y 2013, los traslados en bicicleta pasaron de un  2,3% a 3,7%, mientras que entre 2011 y 2013, el uso de la bicicleta aumentó un 67%.

En el caso de las Oportunidades Económicas que agrupa las alternativas de crecimiento y de logros laborales, la seguridad económica y las proyecciones, entre otros asuntos, la investigación arrojó que un 37.5% de los habitantes tiene un tema económico que le preocupa. Asimismo, un 53% duda que sus hijos puedan costear la vida en la ciudad cuando sean adultos y que el promedio de desempleo llega a un 10%, superando al promedio nacional que es de un 8.4%.

Por último, en Salud, que toma en cuenta que una comunidad prospera cuando las familias y los barrios son saludables, se obtuvo que un 52% no hace actividad a diario.

Proyecciones

Con los resultados, el trabajo parece recién empezar, porque la ciudad anunció que este índice será un referente al momento de elaborar nuevas políticas públicas y el presupuesto público. Asimismo, dará paso al lanzamiento de un sitio web en donde se difundirán los hallazgos y se realizarán talleres en barrios, empresas y organizaciones para analizar los resultados y obtener más opiniones.

En el siguiente video puedes ver una presentación del proyecto.

Los resultados completos para cada dimensión los puedes ver en el informe final de la investigación.