Ninguna empresa del Transantiago alcanza el nivel mínimo de calidad exigido por el Gobierno
Por Manuel Valencia, El Mercurio.
Último ranking de calidad de servicio del sistema:
Frecuencia y regularidad de buses caen respecto de 2014. Operadores culpan a la congestión y a la falta de infraestructura.
A pesar de los millones de dólares invertidos, la renegociación de contratos, los subsidios inyectados para contener el alza de los pasajes y varias modificaciones de recorridos, Transantiago sigue siendo un servicio que no satisface a sus usuarios.
El úndécimo ranking de servicio del sistema, que midió la percepción de los pasajeros entre enero y marzo de este año y la comparó con igual lapso de 2014, refleja, incluso, una caída en los índices de frecuencia (cantidad real de buses dispuestos por cada empresa en sus recorridos) y regularidad (cumplimiento del intervalo entre buses de un mismo recorrido), además de una leve mejora en la calidad de atención al usuario (nivel de servicio que se entrega en ruta a los usuarios en diferentes recorridos, horarios y días).
En específico, la medición evidencia una caída en los niveles de cumplimiento de hasta tres puntos en algunas empresas. En el ítem “Frecuencias”, el sistema cae, en promedio, 1,2 puntos porcentuales. De los siete operadores, solo Redbus muestra una mejora de un punto. La empresa que más bajó en esta categoría es Subus, con tres puntos menos que en el primer trimestre del año pasado.
En el indicador “Regularidad”, hay una baja general de 0,9 puntos porcentuales en los cumplimientos. La que más baja es también Subus (2,3 puntos). En este ítem, obtienen mejorías Vule y Redbus (ver infografía).
El director de Transporte Público Metropolitano, Guillermo Muñoz, atribuye la caída de los índices a la congestión. “También hay otras razones, particularmente asociadas a aquellas eficiencias en la gestión de las empresas. Los rankings han demostrado que hay tres empresas que siguen teniendo un desempeño deficiente y eso genera la mayor baja en los indicadores”.
Otro aspecto que preocupa a las autoridades es la calidad de atención al usuario: ninguna empresa del sistema alcanza aún el nivel mínimo de 85% de cumplimiento exigido por la autoridad. Solo hay una leve mejora de 0,8 puntos porcentuales en promedio. “Esta caída tiene que ver con aspectos específicos, como frenados bruscos o aproximarse de manera incorrecta a los paraderos, en segunda fila. Hay otros como la amabilidad de los conductores, que están bien evaluados”, añade Muñoz.
Víctor Barrueto, director ejecutivo de la Asociación de Concesionarios del Transporte Urbano de Superficie (Actus), reconoce la situación y concuerda con el efecto de la congestión. Añade que también influye “la falta de infraestructura con prioridad para los buses, aunque reconocemos un comienzo de avance en los últimos meses donde se han instaurado más vías exclusivas y pistas solo bus. Sin embargo, los planes de operación carecen del suficiente realismo que necesitan, ya que es evidente que se requieren más buses, como lo han hecho ver explícitamente varias empresas. Pero además no se adecuan las demandas reales de los usuarios, sucediendo que en algunos lugares hay buses de más y en otros faltan”.
En los últimos rankings entregados por el Gobierno, las empresas Alsacia, Express y Subus han ocupado los últimos lugares de los índices medidos. El director de transporte público metropolitano dice que esta situación se tomará en cuenta a la hora de llevar a cabo el proceso de licitación de los recorridos de Transantiago, en 2017.
A juicio del ex coordinador de Transantiago y actual profesor de la UC, Raimundo Cruzat, “culpar a la congestión es tapar el sol con un dedo. El comportamiento de la ciudad no ha empeorado fuertemente en el último año. Lo que hay es que no ha habido una iniciativa dirigida a la frecuencia y regularidad al sistema en general”.
Agrega que el último cambio de contratos, realizado en 2012, pudo influir en el empeoramiento. “Los indicadores que teníamos en los contratos antiguos eran mejores que los que rigen hoy, más estrictos y tenían a las empresas de cabeza para funcionar mejor. Se trató de relajar las multas y penas a la frecuencia y regularidad de buena fe, porque si no quebraban los concesionarios, pero se hace necesario mejorarlos. También hay que trabajar en lo que pasa dentro del bus, para evitar frenazos y estilos de conducción que reprueban los usuarios”, plantea.
Destacadas
Metbus lidera en frecuencia y servicio. STP, en regularidad (día entero y punta matinal).
”Invertiremos en gestión e infraestructura para generar un mejor servicio. Eso no es excusa para que los que hacen las cosas mal no mejoren”. GUILLERMO MUÑOZ Director de Transporte Público Metropolitano
”Las empresas cumplen muy bien, pese a todo. Pero también hay algunas que están al debe y tienen que hacer un esfuerzo”. VÍCTOR BARRUETO Director ejecutivo de Actus
”Se ha relajado la operación y los buses fallan más, pues están más viejos. Así, cuesta cumplir”. RAIMUNDO CRUZAT Ex coordinador del Transantiago y académico UC