MOP compromete despeje de ruta costera en plazo de 2 días
Por I. Godoy, S. Neira y C. Santana, El Mercurio.
Vía que une Tocopilla con Iquique y Antofagasta:
El ministro Alberto Undurraga dijo que se trabaja en limpiar la vía cortada por aludes para restablecer conectividad del puerto nortino.
Ocho máquinas de Vialidad trabajaban ayer en el despeje del barro en la Ruta 1, que conecta Tocopilla con Antofagasta y con Iquique, una vía interrumpida en al menos 35 puntos a causa de rodados y aludes durante el temporal.
Las obras comenzaron en la mañana y se espera que estén listas en un plazo de dos días, aseguró el ministro de Obras Públicas (MOP), Alberto Undurraga, quien se encuentra en la zona más afectada.
Adelantó que la mayor parte de la ruta ya está despejada. “Se ha trabajado hasta el kilómetro 140 que conecta con Tocopilla y quedan 30 kilómetros por despejar”, explicó. Agregó que es prioridad dejar a la población conectada.
“Funcionan desde ayer la ruta María Elena y la Ruta 24; por lo tanto, hay abastecimiento de la ciudad”, señaló el ministro Undurraga.
A 30 kilómetros de Tocopilla, unas 200 personas que viajaban en buses y autos particulares desde la Región de Tarapacá hacia Antofagasta quedaron aisladas en la madrugada del domingo, en medio del temporal. En grupos de seis fueron rescatadas en helicópteros durante la mañana de ayer.
“Perdimos todas nuestras cosas, tuvimos que pasar casi 24 horas aislados (…) estábamos muy cerca de Caleta Buena, en ese sector había muchas casas anegadas y aún no llegaba la ayuda”, afirmó muy conmovida Delfina Callejas, una de las primeras personas en ser rescatadas desde la carretera.
La ruta, hacia el puerto de Iquique, presenta rodados y deslizamientos de tierra.
“Entre Iquique y Tocopilla solo se puede transitar en algunos sectores en vehículos 4×4”, explicó Alejo Palma, director de la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi).
Los 4,6 mm de agua caída en siete horas, desde las 05:00 horas del domingo, provocaron estragos especialmente en los techos de las precarias viviendas de la costa, además de deslizamiento de tierra y rodados de rocas que afectaron casas y bloquearon varios sectores la Ruta 1.
“En el año 40 fue la última lluvia así”, recuerda Diana Rivera, octogenaria vecina de caleta Río Seco, una de las ocho localidades costeras habitadas al sur del puerto de Iquique, que suman unas cinco mil personas, en Tarapacá, región donde el mayor problema fue la lluvia.
En otros sectores, la región resistió bien el aguacero, con problemas resueltos en Alto Hospicio y el anegamiento del terminal del aeropuerto, que motivó a las aerolíneas a suspender vuelos. “La pista no sufrió daños y estuvo siempre operativa”, explicó Palma.
200 personas fueron rescatadas el domingo luego de quedar atrapadas en un corte de camino.
