Inician estudios para soterrar más de un tercio de la red del metro de Valparaíso
Por Jonathan Galarce, La Tercera.
Hoy sólo cinco kilómetros de la vía están bajo tierra y plan apunta a sumar otros 12.
Hace tres semanas, la inundación en una sala técnica del Metro de Valparaíso (Merval), a raíz de las marejadas que afectaron la zona, paralizó por 14 días el servicio, afectó a 70 mil usuarios y dejó daños avaluados en $ 1.400 millones. Esta interrupción del servicio se suma a diversas fallas que ha experimentado el sistema desde su inauguración, en noviembre de 2005 (ver cronología), lo que durante años ha generado un debate sobre cómo mejorar este medio de transporte que anualmente traslada 20 millones de usuarios.
En esa línea, la empresa anunció que en tres años podría concretarse el soterramiento de la red de trenes, para resolver en parte la vulnerabilidad que presenta el sistema. Así lo confirmó a La Tercera el presidente del directorio de la estatal, Germán Correa, quien dijo que lo que se planea, en una primera etapa, es “hundir el tramo entre Caleta Portales y Plaza Aduana en Valparaíso, y posteriormente, el trayecto de las estaciones Quilpué y Villa Alemana, en la zona interior”.
El proyecto -por el cual ya se iniciaron estudios- pretende dejar bajo tierra un 30% de los 43 kilómetros que recorre el servicio, a través de 20 estaciones de las comunas de Valparaíso, Viña del Mar, Quilpué, Villa Alemana y Limache. Actualmente el soterramiento abarca cuatro paradas, en Viña del Mar, desde Miramar hasta Chorrillos, que en total son cinco kilómetros. (ver infografía)
Según Correa, este cambio es relevante considerando “el alto y positivo impacto urbano que ello conlleva”. Además, aclaró que “las inversiones en el Merval son significativamente menores, que las que se realizan en el metro de Santiago y esperamos que el gobierno lleve a cabo alguna redefinición de prioridades en este sentido”.
Al respecto, el ministro de Transporte, Andrés Gómez-Lobo, aseguró que “como iniciativa de largo plazo es viable”, pero recalcó que primero hay que evaluar otras variables. “Si se tienen los recursos hay que analizar si ampliar la red o hundirla. Tenemos que evaluar todas las alternativas”, comentó. El secretario de Estado agregó que “puedo garantizar que, de aquí a diez años más, el Merval crecerá como el eje estructurante del transporte público de Valparaíso”.
Compleja operación
El seremi de Transportes, Patricio Cannobbio, por su parte, dijo que esta propuesta “sería la solución real para problemas que generó el sistema frontal y las marejadas en las estaciones y la sala técnica, aunque es una idea compleja y cara. Sería una solución natural que debería tener un sistema de metro en nuestra región”.
Sin embargo, las fallas no solo se han registrado por las lluvias. En 2013 hubo suspensiones paulatinas del servicio debido al corte de una catenaria, que es la red de alimentación eléctrica que usa el metro para funcionar.
Según Cannobbio, “se puede implementar este proceso, siempre y cuando el sistema eléctrico y electrónico esté protegido y soterrado. Si es así, tendría que ser subterráneo en sus 41 kilómetros y eso es complejo”.
El alcalde de Valparaíso, Jorge Castro, estimó que el soterramiento “es una deuda histórica para la ciudad”. El jefe comunal informó que “ya se iniciaron el estudio para el soterramiento. Todo los espacios que se van a ganar son para espacios comunitarios y va a dar paso al parque urbano más importante de Valparaíso”.
Debate público
Académicos de tres universidades de la zona coinciden la importancia de mejorar el Merval. Alejandra Valencia, experta de la Escuela de Ingeniería en Transportes de la Universidad Católica de Valparaíso, está de acuerdo con la idea de hundir el metro.
“El hundimiento no es muy distinto de lo que se hizo en Viña del Mar, y tiene dos ventajas, ya que va a permitir ganar espacio públicos y se aumenta la capacidad vial para buses y vehículos”, estimó. “Debido a las eventualidades climáticas, es una ventaja que sea subterráneo, ya que no le va a afectar a sus instalaciones, pero, por ejemplo, en Santiago igual entra el agua a las estaciones. Ambos sistemas funcionan de manera distinta. El de Valparaíso es un tren urbano, es difícil que se convierta en un metro soterrado en su totalidad”, agregó.
En tanto, Marcela Soto, arquitecta de la U. Santa María, señaló “que Merval debiera transformarse en un transporte que debería liberarnos de autos, y con menos superficie plana y bien conectada como es el centro de Viña y Valparaíso”.
Mikel Martisa, arquitecto de la U. Andrés Bello, consideró que para poder soterrar el metro debería trasladar su trazado al interior de la ciudad, cerca de las calles principales.