Centros comerciales y CChC temen que proyecto de cobro de mitigaciones financie Transantiago
Por Marco Gutiérrez V., El Mercurio.
Gremios ven nuevo impuesto en iniciativa de aportes al espacio público:
El 70% de la recaudación por concepto de compensaciones indirectas deberá ser destinada a inversiones en transportes. Pago puede llegar hasta el 44% del avalúo fiscal del terreno.
Preocupados están en la Cámara Chilena de Centros Comerciales y en la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) por el impacto que generaría el proyecto que modifica la Ley General de Urbanismo y Construcciones y normas complementarias, para establecer un sistema de aportes al espacio público aplicable a nuevas obras inmobiliarias.
Las inquietudes están relacionadas con los efectos de esta iniciativa sobre los precios de las viviendas nuevas, el costo de desarrollar obras de construcción, la idónea administración de los recursos que se pagarán y el destino de los dineros, que podrían financiar al Transantiago, advierten en dichos gremios.
La iniciativa ingresó al Congreso en 2012, bajo el gobierno de Sebastián Piñera, buscando que los proyectos inmobiliarios compensaran sus impactos. Pero indicaciones realizadas bajo la administración de Michelle Bachelet encendieron las alarmas en el sector empresarial.
El abogado asesor de la Cámara Chilena de Centros Comerciales, Christian Acuña, explicó que uno de los temas cuestionados es el cobro de “impactos indirectos” que superan el entorno más próximo a la obra y cuyo costo puede llegar hasta el 44% del avalúo fiscal del terreno en el caso de proyectos en densificación. Los desarrolladores cuestionan que sus aportes vayan a cubrir déficits de la ciudad que no les corresponde.
De todos modos, la iniciativa indica que los planes habitacionales “que generen crecimiento urbano por densificación que tengan una densidad neta igual o inferior a 200 habitantes por hectárea, no estarán sujetos a la obligación de realizar aportes por mitigaciones indirectas”.
El proyecto de ley indica que al menos el 70% de los recursos recaudados por mitigación indirecta deberán ser invertidos en transporte. En los gremios existe la sospecha de que los dineros se destinen a costear el Transantiago y beneficien a empresas operadas por privados. En 2014, el déficit financiero del Transantiago fue de US$ 665 millones.
Respecto de la administración de los recursos de mitigaciones indirectas, en zonas fuera de áreas metropolitanas, esto correspondería a los municipios. En áreas metropolitanas, los manejaría el gobierno regional (a través de corporaciones).
La iniciativa se encuentra actualmente aprobada por la Cámara de Diputados y en discusión en el Senado para aprobación en particular.
El gerente de Estudios de la CChC, Javier Hurtado, afirmó que “es razonable” que los proyectos inmobiliarios minimicen los impactos generados, pero cuestionó que la nueva normativa busque compensar eventuales efectos en zonas alejadas de la obra o, incluso, en otras comunas. “Es un impuesto”, sostuvo.
Hurtado señaló que se busca destinar el 70% al “transporte, es decir, al Transantiago, que es operado por privados”. Añadió que cualquier ruido adicional ligado al costo de edificación puede verse reflejado en los precios de las viviendas, tal como lo será la puesta en marcha del IVA a la venta de casas y departamentos en 2016, medida que deriva de la reforma tributaria.
El presidente de la Cámara Chilena de Centros Comerciales, Manuel Melero, afirmó que les parece excesivo que se fije hasta el 44% del valor fiscal del terreno para mitigaciones indirectas. Indicó que históricamente el sector ha pagado el 10% mediante los estudios de impacto sobre el sistema de transportes urbano.
Agregó que este proyecto desincentivará las inversiones y los mayores costos se traspasarán hasta los clientes finales. Recordó que los centros comerciales vienen reduciendo sus márgenes desde hace tiempo, lo que se intensificará con otros cambios ligados a la reforma tributaria.
No fue posible obtener una versión del Ministerio de Vivienda.