Chile modera meta de reducción de emisiones para cumbre climática de París

cumbre climatica parisPor C. González y C. Espinoza, La Tercera.

Gobierno anunció rebaja de 30% a 2030 de CO2, lejos del 45% que en algún momento se barajó. Meta del 45% sólo se impondrá si es que el país obtiene recursos internacionales.

El lunes, la presidenta Michelle Bachelet anunció  en su discurso ante la ONU, en Nueva York, que Chile reducirá sus emisiones de CO2 (dióxido de carbono) al 2030 en 30% con respecto a los niveles de 2007.

Esta cifra será la contribución con que el país llegará, en diciembre, a la cumbre que se realizará en París, para alcanzar un acuerdo global que permita evitar que la temperatura del planeta suba de 2°C este siglo. Este fenómeno es generado por gases como el  CO2, de ahí la importancia de reducirlos (ver nota secundaria).

El ministro de Medio Ambiente, Pablo Badenier, señaló que la propuesta es ambiciosa, pero más moderada que las opciones A y B que estaban en juego en el proceso de participación ciudadana que se realizó entre enero y abril. La  opción A planteaba una reducción al 2030 de 45%, porcentaje que ahora quedó supeditado a la llegada de recursos internacionales provenientes del denominado Fondo Verde.

“Esto es una oportunidad para Chile,  porque las políticas públicas que más nos permiten reducir gases de efecto invernadero son, por ejemplo,  mejorar la disponibilidad de suelo para uso forestal, mejorar la participación de las energías renovables no convencionales, y eficiencia energética, tres políticas públicas que ya están encaminadas y son ahorros”, dijo el ministro a La Tercera. 

El principal emisor de gases de efecto invernadero de Chile es el sector Energía, que representa el consumo de combustibles fósiles, constituyendo el 74,7% del total de las emisiones de Chile al 2010.

Susana Jiménez, analista  del Instituto Libertad y Desarrollo, valoró el camino moderado por el que optó Chile, considerando que contribuye con apenas el 0,25% de las emisiones globales que provocan el calentamiento global (ver infografía).

“El anuncio es más razonable que lo que se había propuesto originalmente, por lo tanto, acogió la preocupación y la alerta que surgió desde distintos sectores de la economía respecto de lo que esto podía significar para la actividad económica”, dice Jiménez.

Claudio Seebach,  vicepresidente ejecutivo de la Asociación Gremial de Generadoras de Chile, que agrupa a siete grandes firmas del país, la meta es ambiciosa, pero se puede cumplir.   “Es un compromiso de aporte a la mitigación del cambio climático bastante exigente, pero posible de cumplir, lo que se traduce en una propuesta responsable y coherente con nuestro desafío de desarrollo como país. El sector generación se encuentra comprometido con este fin a través del desarrollo de energías renovables como la hidroeléctricidad, solar, eólico y otras, además del desarrollo de tecnologías de captura”, señaló.

Insuficiente

¿Por qué Chile no optó por la propuesta más alta?. El subsecretario de Medio Ambiente, Marcelo Mena, aclara que tiene su origen en el cambio del escenario económico y la necesidad de priorizar.

Consultado si una meta mayor implicaba mayores restricciones a la industria, señaló que es un “falso dilema” y que la meta va a generar un crecimiento económico adicional de un 4,1%  al 2030.

Maisa Rojas, investigadora del Centro del Clima y la Resiliencia (CR2), dice que la meta planteada por Chile, “es decepcionante”, porque es inferior a las que se discutieron en un principio y que ya eran consideradas insuficientes en sitios especializados como Climateactiontracker.org.

“Chile dice que las va a reducir respecto al 2007, no está diciendo que va a dejar de emitir.  Si nosotros hacemos menos, otros tendrán que hacer más”, dice Rojas, que advierte que el país debe pensar cómo llegar a las cero emisiones, porque existe una cantidad finita de carbono que se puede emitir a la atmósfera. “De esa cantidad, el 65% ya está en la atmósfera. Eso significa que en un momento no muy lejano tenemos que dejar de emitir CO2”, explica.

Para la investigadora, el lado positivo del anuncio es que se deja la puerta abierta al 45% con ayuda internacional, cifra que podría aumentar con el impulso de las energías renovables no convencionales. En esta línea, el Ministerio de Energía anunció ayer  que al menos un 70% de la matriz energética al 2050 debe provenir de fuentes renovables.

Flavia Liberona, directora de Fundación Terram, señaló si bien Chile no contribuye con grandes emisiones de gases de efecto invernadero en el contexto mundial, sí es relevante su aporte per cápita, es el segundo en la región, tras Venezuela. A lo anterior se suma que el país ha aumentado en 40% sus emisiones en los últimos 20 años

“Tomando todo lo anterior, las contribuciones anunciadas por Chile son por decir lo menos muy moderadas”, dijo.

La propuesta de Chile con miras a la cumbre de París, no solo incluirá la cifra del 30% sino que también otras medidas como el compromiso de forestar 100 mil hectáreas, en su mayoría con especies nativas, para capturar CO2. Este compromiso está condicionado a la prórroga del Decreto Ley 701 y a la aprobación de una nueva ley de fomento forestal.

Rodrigo Catalán, director de Conservación de WWF , señaló que nos les parece adecuado que este compromiso vaya a estar supeditado a este decreto, que a su juicio ha tenido impactos negativos sobre el medio ambiente y las comunidades locales. “Se trata de una ley que no ha sido sometida a consulta indígena y que ha generado sustitución de bosques nativos, cambios de uso de suelo con desplazamiento de actividades productivas, disminución de la disponibilidad de agua en las cuencas, agudizada con el cambio climático; fragmentación de paisajes y ecosistemas, invasión de especies exóticas, incidencia en procesos de migración campo ciudad, entre otros aspectos”, aseguró.