Quintero se divide ante proyecto hotelero de lujo con permisos cuestionados
Complejo turístico Decameron en sector de dunas de Ritoque: Seremi de Vivienda exige a Dirección de Obras de Quintero que se pronuncie, como pidió Contraloría, sobre su caducidad.
La Dirección de Obras Municipales (DOM) de Quintero debe decidir, dentro de 20 días, el futuro del complejo turístico que la cadena hotelera internacional “Decameron” proyecta instalar en el sector de las dunas de Ritoque, sitio prioritario para la biodiversidad en la V Región.
La Seremi de Vivienda ofició al titular de esa repartición, Luis Bernal, para que se pronuncie sobre un aspecto fundamental observado por la Contraloría Regional en un dictamen evacuado el pasado 11 de septiembre. Esto es, si ha caducado la autorización original que sustenta hasta hoy el desarrollo de todo el proyecto: el permiso otorgado en 2008 para lotear el terreno de 29 hectáreas donde ahora se pretende levantar el hotel y cabañas para cobijar a 700 pasajeros.
Los US$ 44,5 millones de inversión que exige es la mayor en el ámbito turístico que se ha anunciado para Quintero en las últimas décadas y, según sus promotores, haría a la comuna recuperar el añorado rol turístico que jugó hasta los años 50, perdido por décadas de emplazamientos de industrias contaminantes. El presidente de la Unión Comunal de Junta de Vecinos, Víctor Merino, dijo que por ello la mayor parte de las 23 organizaciones vecinales resolvió, en julio, respaldar la iniciativa si logra aprobar su estudio de impacto ambiental, hoy en trámite. “Si no queremos más industrias, debemos acoger estas inversiones. Quintero no puede quedarse estancado, sino progresar”, advirtió.
Los detractores, liderados por la organización ambientalista Dunas de Ritoque, advierten que la iniciativa pone en riesgo el frágil ecosistema del campo dunar, y reunieron 4 mil firmas opositoras, muchas de ellas de no residentes en la comuna. Apuestan porque las irregularidades observadas por Contraloría impidan a la constructora Riviera insistir en un proyecto que se acoge a las condiciones permitidas por el Plan Intercomunal de Valparaíso de 1965, pero no por las del actual Plan Regulador Metropolitano, de 2014. “La Contraloría nos da la razón. El permiso de loteo otorgado en 2008 caducó, porque no se concretó su urbanización en los tres años que exige la ley. Los permisos posteriores que modificaron el loteo, aprobaron el anteproyecto y aprueban su construcción son inválidos”, dice el dirigente Andrés León.
Paro el abogado de la constructora Riviera, Arturo Fermandois, un permiso no puede caducarse 7 años después de otorgado, pues las eventuales irregularidades estarían prescritas, y opera el principio de confianza legítima del titular, según el criterio imperante en los fallos judiciales. “La DOM debe ofrecer un camino con pleno respeto de los permisos”, dijo.