Autos a gas ahorran hasta $2 mills. al año, pero mercado prevé bajo crecimiento
Hay unos 35 mil vehículos convertidos: El incremento se ralentizaría debido a las leyes chilenas, que solo permiten adaptar vehículos para uso comercial.
A la fecha, los autos convertidos a gas en Chile ya son 35 mil, pero el alza podría verse obstaculizada. Durante 2015 se espera que se incorporen entre 2.500 y 3.000 nuevos autos de este tipo al parque -los años anteriores el rango iba entre 6.000 y 7.000-, lo que es apenas el 1% de lo que crece el parque vehicular total. Esto, pese a que este combustible contamina entre 5 y 8 veces menos que el diésel.
Los pronósticos para 2016 no son auspiciosos. Rodrigo Araya, gerente comercial de Autogasco, señala que para el próximo año se espera un menor crecimiento por las restricciones a la industria por la regulación: hoy solo se permite adaptar vehículos para uso comercial.
Existen dos tipos de combustibles de este tipo: el gas licuado o GLP -que agrupa al 71% de los 35 mil autos-, y el gas natural vehicular (GN), que solo se encuentra en la Región Metropolitana y en Magallanes. Estos permiten un ahorro promedio anual de $20 a $25 por kilómetro en el caso del GLP, y de $30 a $35 por kilómetro en el caso del GN, lo que significa que un conductor que recorre 200 kilómetros diarios -el promedio de los taxistas colectiveros- puede ahorrar entre $1,5 millones y $2 millones al año, estima Araya.
Contradicción
Cada vehículo convertido a gas equivale a plantar 14 árboles al año. Además emiten 80% menos de material particulado y contiene un 30% menos de CO {-2} que el diésel. No obstante, este último es el combustible líquido con menor carga impositiva, con solo un cuarto del impuesto específico que tiene la gasolina.
A juicio de Araya, esto es inexplicable. “Como tampoco se entiende que no se impulse esta tecnología en el transporte público, dado el déficit financiero que este tiene y los niveles de contaminación que genera”, sostiene. En Perú, los vehículos con gas llegan casi al millón y en Argentina superan los 3 millones, una cifra considerablemente superior a la de Chile.
El ejecutivo revela que no han podido avanzar lo suficiente en las conversaciones para hacer un cambio regulatorio. Aun así, tienen cierto alineamiento con algunos diputados y senadores, y con los ministerios del Medio Ambiente, Energía y Transportes; así como de alcaldes e intendentes.
Con estos últimos se ha conversado la idea de impulsar iniciativas para entregar mayores incentivos a ofertas que incorporen tecnologías limpias en las licitaciones de transporte público y servicios de recolección de basura. “Sin embargo, creemos que si no logramos acercamientos y establecemos una agenda decidida en materia tributaria e incentivos, no tendremos muchos avances en el corto plazo”, dice, y recalca que casi dos tercios del combustible que se consume en Chile es diésel.
AhorroCon el uso del gas, se pueden obtener ahorros cercanos al 40% respecto de la gasolina, y además se contamina menos el medio ambiente.