Rediseñan central que monitorea y resuelve las alertas de maremotos
Por: Hernán Cisternas Arellano.
Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada: Modernización tecnológica exigió mejorar y optimizar la coordinación de las distintas estaciones de trabajo.
La inauguración de una nueva sala de operaciones para el Sistema Nacional de Alarma de Maremotos (SNAM), que optimiza el procesamiento de información, el monitoreo y la toma de decisiones a partir de un sismo de magnitud suficiente para generar un tsunami , permitió ayer al contralmirante Patricio Carrasco, director del Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA), exponer ante el ministro de Defensa, José Antonio Gómez, los avances logrados a partir de las lecciones aprendidas tras la catástrofe del 27 de febrero de 2010.
Recordó que cuando el SNAM se creó, en 1961, su funcionamiento partió con cinco estaciones de monitoreo, cuyos antecedentes se transmitían por telegrama; en la década de 1970 se pasó a 12 y para el evento del 2010 ya había 20, pero con serias deficiencias en las comunicaciones. Hoy se dispone, a lo largo del litoral nacional, de una red con 40 estaciones que transmiten información en tiempo real y cuatro boyas en aguas profundas -a cinco mil metros de profundidad- frente a las costas de Iquique, Mejillones, Caldera y Constitución, cuyos sensores de alta precisión y tecnología pueden obtener registros de maremotos tan pequeños como de un milímetro de altura, que se informan satelitalmente.
Para optimizar la toma adecuada y oportuna de decisiones, que permitan alertar a la población de un eventual maremoto, se rediseñó la sala de operaciones del SNAM, disponiendo estaciones de trabajo que junto con permitir una mejor coordinación, proporcionan ahora una visión panorámica de los acontecimientos a quienes tienen que resolver tras el procesamiento, monitoreo y modelación de la información recibida.
El contralmirante Carrasco explicó que el SHOA está en un proceso de mejora continua para enfrentar de mejor forma las emergencias. Planteó que “no podemos detener la ocurrencia de nuevos sismos en nuestro país; muchos de ellos pueden ser generadores de tsunamis , pero tenemos la certeza de que estas nuevas dependencias y su equipamiento, junto al personal altamente calificado y entrenado, están listos para entrar en acción ante un evento”.
A través de un proyecto Fondef (Fondo de Fomento de Desarrollo Científico y Tecnológico) se trabaja con la Universidad Federico Santa María en el desarrollo de un sistema de predicción, que permita emitir alertas de maremoto en forma sectorizada.
Con un prototipo de la Agencia del Espacio de Alemania se han cargado 800 escenarios posibles, en marzo próximo se llegará a 1.500 y se espera una meta final de 7.000.
PRECISIÓN
Boyas a 5 mil metros de profundidad registran pequeños tsunamis de hasta 1 mm de altura.