Hasta 12% cae el valor promedio de viviendas para arrendar en el verano en los principales balnearios del país
El actual escenario económico y las distintas catástrofes naturales que afectaron durante 2015 a varios destinos íconos del verano, como La Serena y Viña del Mar, explicarían, en gran parte, esta tendencia a la baja de los precios. Esta temporada, además, se observa una baja en el número de días de alquiler. María de los Ángeles Pattillo
El año pasado era más caro que ahora arrendar una vivienda para veranear. Así se desprende de un estudio solicitado por “El Mercurio” a Portalinmobiliario.com, considerando las seis ciudades con más oferta de temporada a nivel nacional: La Serena, Algarrobo, Viña del Mar, Concón, Zapallar y Pucón. En dichos destinos, la baja de precios promedio se mueve entre un dos y un 12% en los departamentos de 65 m {+2} , y hasta en un 11% en las casas de 100 m {+2} , justamente las superficies más ofertadas para el alquiler por día.
La Serena es la que presenta la caída más importante en el mercado en altura, mientras que Zapallar es la zona donde se observa menos variación. En este caso, los arriendos de departamentos el año pasado se encontraban en promedio a 3,20 UF diarios, cifra que en esta temporada llega a 3,13 UF (unos $80.300). En el mercado de las casas también se aprecia la estabilidad de este balneario del litoral central: Si en Pucón la tarifa diaria promedio cae 11%, en Zapallar solo se mueve un 1% hacia arriba.
“Zapallar tiene un perfil socioeconómico marcadamente AB, y ahí no se perciben mayores efectos de la desaceleración económica, cosa que no ocurre en otras zonas que son más heterogéneas”, estima Víctor Danús, gerente general de la corredora ProUrbe, firma que trabaja en la Quinta Región.
Para Nicolás Izquierdo, subgerente de estudios de Portalinmobiliario.com, el actual escenario económico es clave a la hora de entender el comportamiento tarifario: “Ante mayor incertidumbre, las personas posponen decisiones relacionadas con gastos de entretenimiento y vacaciones. Por lo mismo, es natural que la demanda tienda a bajar, y los precios reaccionan a eso”.
El alza del dólar, que incide en que para los chilenos sea más caro veranear fuera del país, no ha logrado empujar la demanda interna, coinciden distintos actores del mercado. La divisa debiera estimular la llegada de extranjeros, pero aunque los argentinos se mantienen fuertes, la presencia de brasileños ha tendido a caer por la depreciación del real.
Desastres naturales condicionan oferta
Otro factor que contrae los valores es el aumento de la oferta disponible. Eso explicaría lo que pasa en Pucón, cree Claudio Vergara, socio de la corredora local PSM Propiedades: “Mucha gente de acá se hace una o dos cabañas para arrendar durante el verano, por lo que cada vez hay más opciones en distintos rangos de precio”.
Algo parecido ocurre en Viña del Mar, que pasó de 2,66 UF diarias promedio a 2,36 UF (cerca de $60.600) en un año; es decir, una disminución de un 11%. “Al haber una fuerte oferta de departamentos, compiten entre sí y los precios tienden a hacerse más atractivos”, indica Danús.
A lo anterior se suman los desastres naturales que han afectado con más o menos intensidad a los distintos destinos. Viña del Mar sufrió un fuerte oleaje que destruyó su playa, Pucón se vio aquejado por episodios de actividad volcánica que tuvo durante el año el volcán Villarrica, y La Serena sufrió un terremoto y posterior tsunami.
En el caso de La Serena, dichos eventos serían determinantes a la hora de explicar el bajo ritmo de los arriendos de temporada. “Los turistas tienen miedo de estar en el borde costero, aunque gran parte de la infraestructura va a estar lista para el verano”, destaca el broker de Re/Max Pro La Serena, Julio Gajardo.
La ciudad ha reaccionado con una fuerte caída de precios. Si en el período estival de 2014-2015 la tarifa diaria promedio era de 2,63 UF, esta temporada la cifra llega a las 2,31 UF ($59.100, aproximadamente); es decir, un 12% menos. Izquierdo cree que esta tendencia a la baja es una buena medida: “El balneario se hace más competitivo y de esa forma logra atraer demanda”.
Veraneantes arriendan por menos días
El año pasado, en esta época ya eran pocas las opciones de primera línea que quedaban disponibles en los principales balnearios del país, según cuentan distintos corredores. En la actualidad, a pesar de los precios más atractivos, la demanda ha estado más lenta. “Si hace 12 meses recibíamos diez llamados, este año son siete”, destaca Vergara, con presencia en Pucón. Mientras, en La Serena hay un 40% menos de solicitudes, según Gajardo.
“Este año la gente comenzó a buscar más tarde. Generalmente en noviembre o incluso antes comenzaban a preguntar. Ahora se retrasó en unas tres semanas, y actualmente hay mucho interés”, señala Danús respecto del litoral central. Sin embargo, muchos de quienes arriendan no lo están haciendo como de costumbre, advierte el mismo corredor: “Se está dando mucho que dos familias reservan una casa. Es una fórmula que el año pasado no se veía tanto”.
Otro cambio en la demanda es por el número de días de alquiler. “Si antes se tomaba una propiedad por 15 días, ahora la mayoría lo está haciendo por 10. Claramente se ve una merma en el tiempo de permanencia”, agrega Danús. En esa línea, Gajardo indica que tiene que respetarse un mínimo para que sea rentable el negocio: “No vale la pena arrendar por muy pocos días, pues hay gastos fijos asociados, como el aseo profundo. Generalmente los acuerdos no se cierran por menos de cuatro días en esta época de verano”.
En todo caso, al menos en La Serena los propietarios están haciendo más concesiones, reconoce Gajardo: “Las personas están más sensibles a aceptar ofertas. Si alguien toma más de 10 días, hay un descuento en el precio, cosa que años atrás era mucho más rígido”. Independiente del número de días, el total de la rebaja depende de la ubicación de la propiedad y de cuál sea su nivel de demanda. En La Serena, por ejemplo, se pueden ver descuentos por el mes completo de hasta 25% en viviendas de menor interés turístico, cifra que el año pasado no superaba el 15%.
Expertos llaman a firmar contratos para evitar estafasMuchos arriendos de verano son informales, lo que puede derivar en estafas y malos ratos para los veraneantes. Por lo mismo, distintos actores del mercado hacen sus recomendaciones:
S Visitar la propiedad antes de cerrar el trato. Verificar número de dormitorios, estado del equipamiento y cantidad de estacionamientos.
S Firmar un contrato de arriendo temporal con el representante de la propiedad. “Hay que dejar establecido que los gastos comunes, así como el consumo de electricidad, gas y agua potable, son de cargo del propietario”, indica Víctor Danús.
S Hacer inventario. Este debe detallar el equipamiento de la vivienda y el estado en el que se entregan.
S Comparar con otras viviendas del sector. “Hay que sospechar cuando una casa o departamento se ofrece a un precio muy bajo en relación con su ubicación, equipamiento y tamaño”, advierte Nicolás Izquierdo.
S Preferir una oficina de corretaje. Esta debe contar con página web, teléfono fijo, dirección establecida. Además, antes de depositar cualquier anticipo, chequear antecedentes comerciales de la contraparte.