Restauración del Teatro Municipal de Iquique provoca división entre las autoridades regionales
El edificio, Monumento Nacional, resultó dañado por el terremoto de 2005:
Alcalde rechaza aumento de costos del proyecto, busca ejecutar las obras y reemplazar a la Dirección de Arquitectura del MOP.
Una fallida licitación, un diseño que no incluyó detalles de la construcción y daños recientes por el terremoto de 2014 han hecho que la restauración del Teatro Municipal de Iquique, Región de Tarapacá, requiera de US$ 3,5 millones extras al presupuesto inicial de US$ 7,7 millones, lo que ha provocado tensión y división entre autoridades municipales y de gobierno.
El alcalde de Iquique, Jorge Soria, cree que debe ser la Unidad de Arquitectura municipal la que se encargue, de ahora en adelante, del proyecto. “Debe pasar a la municipalidad, porque lo que hace el Ministerio de Obras Públicas (MOP) es traer a contratistas para cada área que encarecen los proyectos”, dice.
El MOP inició una ofensiva para ajustar el plan a los nuevos requerimientos y conseguir más fondos. “Es pronto para decir que peligra su restauración, ya que una vez finalizada una consultoría se presentará nuevamente el proyecto a los concejales para que entiendan el porqué de los costos”, señala Eugenio Hidalgo, seremi del MOP.
La polémica retrasaría al menos un año el inicio de las obras del teatro, declarado en 1977 Monumento Nacional, y cerrado hace ocho años para espectáculos luego que un estudio realizado tras el terremoto de 2005 determinara, además, que una plaga de termitas afectaba su segundo y tercer nivel.
El presupuesto de restauración fue aprobado el 2012. Un 50% fue financiado por el gobierno regional, 30% por el Ministerio de Cultural, y 20% por la municipalidad, quienes se oponen al proyecto en su estado actual y han presentado cuestionamientos, como solicitar modificaciones al plan elaborado por el arquitecto Patricio Gross, pedido por la anterior administración comunal.
El director de Arquitectura de Tarapacá, Vladimir Urias, explica que la restauración incluye dejar al teatro completamente operativo, con la capacidad y tecnología para albergar espectáculos masivos. “El propósito es dejar habilitado un teatro de 1890 a uno de 2015, con las facilidades y capacidad técnica y de seguridad para recibir espectáculos de gran escala”, cuenta.
La dirección de Arquitectura del MOP inició un trabajo conjunto con el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, a través del Centro Nacional de Conservación y Restauración, para realizar una consultoría que permitiría volver a licitar las obras en el segundo semestre de 2016, y así iniciarlas durante 2017.
US$ 7,7
millones era el presupuesto inicial de restauración. Se debieron sumar US$ 3,5 millones.
18
meses tiene como plazo la ejecución de las obras, que no partirían antes del 2017.
800
personas de capacidad tiene el sitio. Construcción se comenzó a idear en 1886.