Zapahuira, el primer enclave de servicios que se gesta en el acceso al altiplano

Por Mario Rojas Martínez.

Ubicado a mitad de camino en ruta Arica-Bolivia:

Desde hace un año funciona el único aeródromo de la provincia de Parinacota. Ahora se sumará una bencinera y estación de servicio, y también un juzgado de policía local.

Zapahuira, ubicado a casi 3.500 metros de altitud, en lengua aimara significa “río solitario”. Milenario lugar de descanso en la ruta entre la costa y el altiplano, hoy es un caserío donde predominan restaurantes, que son parada obligada para camioneros y turistas en tránsito entre Arica, el lago Chungará y Bolivia.

Emplazado a medio camino en una carretera internacional de casi 200 km, en forma paulatina se está transformando en el nuevo y primer enclave de servicios en el ingreso al altiplano, cerca de la bifrontera con Perú y Bolivia. Hace un año fue inaugurado el hasta ahora único aeródromo de la provincia de Parinacota, con una inversión de $1.744 millones para una pista de 2,3 km de largo y 23 metros de ancho. “También habrá un juzgado de policía local”, anuncia el gobernador Roberto Lau.

Este año se sumará la primera estación de servicio y bencinera en esa zona extrema. La más cercana está en Arica, más de 100 km hacia la costa. “Es una parada obligada para turistas y la mayoría de los 500 vehículos que circulan ahí al día”, dice Ricardo Jorquera, director de la Cámara de Turismo de Arica.

Diez
habitantes permanentes tiene Zapahuira. Una cifra que al menos se triplicará.

350
camiones al día , en promedio, circulan por esta localidad.

Tres
productos caracterizan a esa zona: infusiones para combatir la puna, platos con carne de camélidos y picantes.