Fallecidos por siniestros de tránsito llegan a 1.640 en 2015, la mayor cifra en siete años
Chile se aleja del compromiso de reducir en 50% los muertos en 2020, asumido en 2010 ante Naciones Unidas:
Especialistas critican al Gobierno por no tener una estrategia dedicada a disminuir la cantidad de víctimas fatales sostenidamente.
Una cifra récord en mortalidad por siniestros viales alcanzó el país el año pasado, según datos de Carabineros y publicados por la Comisión Nacional de Seguridad del Tránsito (Conaset).
En 2015 se registraron 1.640 muertos por accidentes en cerca de 80 mil siniestros, una cifra que superó en diez casos a los registrados en 2014 y la mayor en siete años, desde que en 2008 se constataran 1.780 fallecidos.
A juicio del especialista en seguridad vial Francisco Frésard, este aumento evidencia la falta de una estrategia. “Se necesitan decenas de años, una gigantesca inversión, un Estado responsable y una sociedad comprometida. Al nivel táctico, partir con pequeñas medidas, como dotar a la policía de pistolas y empezar a fiscalizar la velocidad en todo tipo de vías”, afirma.
Según plantea, desde el punto de vista práctico “se requiere abordar medidas de seguridad vial universalmente eficaces, que son aquellas que actúan sobre los factores de riesgo más básicos, como la velocidad, calidad del sistema vial y la vulnerabilidad de los usuarios”.
Meta perdida
El alza registrada este año aleja a Chile del cumplimiento de un compromiso sellado en 2010, en el marco de la “Década para la acción en seguridad vial” de la Organización de Naciones Unidas (ONU). En él, el Gobierno chileno se comprometió a reducir en 50% las muertes por siniestros viales hacia 2020. De ese modo, los 1.573 muertos que se contaban entonces debían bajar hacia 787. Una cifra lejana de los 1.640 de 2015.
También el Gobierno anterior comprometió disminuir las muertes en 20% hacia el fin de esa administración, pero en 2014 los fallecidos fueron 1.630 (3,6% más).
La secretaria ejecutiva de Conaset, Gabriela Rosende, señala que se debe seguir trabajando en los factores de riesgo. “Es necesario aumentar los controles de velocidad e incorporar tecnología. El alcohol lo hemos trabajado con las leyes Tolerancia Cero y Emilia, y ahora tenemos que incorporar el alcotest evidencial. Y también ayudará la reducción de la velocidad máxima en zonas urbanas a 50 km/h”.
Para el especialista en seguridad vial y gerente de asuntos públicos de Automóvil Club, Alberto Escobar, se debe agilizar el proyecto de ley presentado por el gobierno anterior, que crea un Centro Automatizado de Tratamiento de Infracciones (CATI), la entidad que fiscalizará infracciones como el exceso de velocidad a través de cámaras, muy similares a los fotorradares. “Ese proyecto duerme el sueño de los justos y en Chile el 60% admite exceder la velocidad máxima en ciudades y el 50% en carreteras. Hoy solo se fiscaliza el 7% de los delitos viales y se necesita una señal de firmeza”.
Proyecto de fotorradares
El Gobierno ha puesto y retirado urgencias a la iniciativa ingresada en enero de 2014, con lo cual su tramitación no ha avanzado. No ha pasado de la comisión de Transportes a la sala, en la Cámara Baja. Déficit en el conteo de las víctimasLos 1.640 muertos por accidentes el año pasado son los que fallecieron en el lugar del siniestro o 24 horas después de ocurrido. Sin embargo, aquellos que perdieron la vida 20 o 30 días después de un siniestro vial -por ejemplo, en un hospital por lesiones derivadas de un choque o atropello- no son considerados víctimas.
Francisco Frésard dice que en realidad son 2.181, según lo cita el último informe estadístico de 2015 elaborado por el sistema IRTAD de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE).
La misma apreciación tiene Alberto Escobar: “Según nuestros datos, los muertos son 2.200. En los países desarrollados se sigue un conteo hasta por 30 días de las personas que fallecen producto de un siniestro. Acá nada, se requiere un seguimiento para tener cifras más reales”.
En la administración anterior, Conaset, que agrupa a representantes de distintos ministerios, como Transportes, Justicia, Salud, Educación y Obras Públicas, inició un trabajo para crear un sistema integrado de información, lo que aún no se logra concretar.