“Pondremos todos los recursos necesarios para compensar a los vecinos afectados”
Por Aldo Lingua y Oriana Fernández.
Guillermo Ruiz Pérez, Presidente del Consorcio Santa Marta, sostiene que implementará un plan de ayuda a la comunidad tras el incendio en el relleno Santa Marta.
“Acá no hubo hechos delictuales, fue un accidente”, dijo ayer Guillermo Ruiz Pérez, presidente del Consorcio Santa Marta, dos días después de que comenzara el incendio en el relleno sanitario, que cubrió a la capital con una nube de humo con niveles de toxicidad el día martes. Ruiz es el máximo representante del grupo conformado por cuatro compañías nacionales: Hidrosán, Empreterra, Inversiones Agua Santa e Inversiones y Servicios (Inser). La firma comenzó a operar en 2002 cuando abrió el relleno donde se dispone el 31% de la basura de la capital, equivalente a 100 mil toneladas por mes.
¿Se van a entregar compensaciones a los vecinos afectados en su salud?
Nosotros trabajamos muy cercanamente con una organización llamada comité de ayuda social de Lonquén, que canaliza muchas necesidades de las personas. No solamente problemas que hayamos ocasionados nosotros, sino que de diverso tipo. Tenemos un área especial de educación, programas para madres que trabajan, salas cunas. Entonces ellos están ahí.
¿Cuántos son los recursos que dispondrán para posibles ayudas a la comunidad?
Todos los recursos que sean necesarios. Esta empresa se ha caracterizado por ir primero con la solución y después veremos cuánto sale.
¿Poseen una estimación de las pérdidas por la paralización de actividades producto del incendio?
No. Y no la quiero tener para no menoscabar el impulso, porque si yo les digo a los gerentes que tienen una cuota de tantos millones (para solucionar los problemas del incendio) entonces ellos me van a decir que se van a salir del presupuesto. Creo que hoy día está la chequera abierta para resolver a la brevedad los problemas que tengamos.
Han subido los costos de las municipalidades por trasladar su basura a otros acopios.
Esto no es primera vez que sucede. El último caso fue el terremoto de 2010, cuando solamente Santa Marta quedó operativo y nosotros recibimos residuos de todas las comunas, durante cerca de un mes, mientras los otros rellenos se rehabilitaban. Y como todas las cosas, nos sentamos las partes involucradas, nos pusimos de acuerdo, distribuimos los costos y llegamos a un acuerdo razonable. Una de las ventajas e importancias que en Santiago existan tres rellenos sanitarios es que ninguno está exento de tener un accidente como éste. Entonces si uno está inhabilitado, están los otros dos.
Tras el siniestro, los vecinos han denunciado que el agua tiene niveles de contaminación.
Estamos monitoreando y conseguimos un análisis en conjunto con la autoridad de todos los puntos y ahí vamos a detectar (si hay alguna anomalía). Es difícil basarse en que digan que el agua la encuentran mala o de otro color. Con los estudios se va a poder comprobar.
La Fiscalía Metropolitana Occidente está investigando este hecho. ¿Usted cree que esto es un evento que se debe indagar penalmente?
Creo que siempre tiene que haber una investigación penal y me encanta que esté la PDI indagando y conversando con toda nuestra gente. Creo que nunca se debe descartar nada a priori, pero nuestra impresión, por las cosas como están y en opinión de nuestros técnicos, es que esto fue algo netamente accidental. La Universidad Católica de Valparaíso y sus profesionales son los que más saben y nosotros los llamamos para investigar. Fue un accidente lamentable que afectó a muchas personas, pero que vamos a hacer todo lo posible para que no vuelva a repetirse.
¿Podría ser llamado a declarar ante la fiscalía?
A mí no me han interrogado ni preguntado, pero a casi todos los trabajadores sí. En el momento de los hechos yo no estaba aquí, pero estoy disponible para hacerlo. Reitero, aquí no hubo hechos delictuales, fue un accidente.
¿Se ha determinado si hubo responsabilidad de los trabajadores? ¿Desvincularon a parte del personal por este hecho?
Esto es grave, pero no hemos desvinculado a nadie ni tenemos sospechas de intencionalidad. Obviamente que nosotros vamos a aprender de esta experiencia, en todos los sentidos. Nunca nos había sucedido y tenemos que sacar enseñanzas.
¿Le duele lo que ha pasado?
Muchísimo. Y me duele por las personas que han sido afectadas. Me duele por los trabajadores de esta empresa. Me duele porque este es un relleno que nosotros siempre quisimos que fuera modelo, que nunca estuviera en estas circunstancias. Pero nos ha pasado y nos duele muchísimo. Creo que esa es la parte más dura.