Impacto de marejadas provoca daños puntuales en borde costero de Viña del Mar
Por Mauricio Silva y Catalina Yob.
Expertos advirtieron que magnitud del fenómeno se incrementaría durante la madrugada de hoy:
El estacionamiento del Hotel Enjoy y dos pubs resultaron inundados, y varios vehículos fueron arrastrados por la fuerza del mar en la avenida Perú.
De forma intermitente, durante la jornada de ayer olas de hasta cinco metros golpearon con gran fuerza el borde costero de Viña del Mar, provocando congestión vehicular, cierres temporales de calzadas e incidentes aislados de vehículos.
Sin embargo, el episodio más intenso se vivió a partir de las 21:00 horas, cuando se alcanzó la pleamar -el momento en que el mar logra su altura máxima- y olas irrumpieron en el sector de la Av. Perú, entre 1 y 6 Norte, en particular frente al casino y la Plaza Colombia.
Hasta el cierre de esta edición, los principales damnificados eran los dueños de los vehículos estacionados en la mencionada avenida. María Ignacia Torres relató que llegó a las 20:45 horas a tomarse un café en uno de los locales del sector, y cuando vio movimiento de carabineros y personal de seguridad, fue a ver su vehículo, pero la fuerza del mar ya lo había movido, dejándolo sobre el pasto, con todo el sistema eléctrico inutilizado.
También resultó inundado con cerca de 20 cm de agua el estacionamiento subterráneo del Hotel Enjoy, que tenía los 235 espacios ocupados. A través de la redes sociales, residentes y turistas difundieron imágenes y videos que dieron cuenta de la magnitud de las olas, y de las inundaciones que estas provocaron en los lugares cercanos a la costa.
Además, dos pubs ubicados en calles laterales cercanas a la avenida Perú resultaron inundados.
Revisarán calles costeras
Desde la Armada, el gobernador marítimo de la zona, Rodrigo Vattuone, explicó que las olas registradas anoche tienen una proyección de hasta cien metros tierra adentro, y que por esto se revisará el socavamiento de las avenidas costeras, así como también se prohibió el zarpe de la pesca artesanal.
El origen del fenómeno está en el hemisferio norte, por el invierno boreal, a raíz de tormentas cerca del ártico, desde donde nace el oleaje y se esparce hacia el sur. Debido a la gran distancia, las olas pierden altura, pero ganan energía horizontal, lo que explica la fuerza con la que han llegado hasta la costa chilena.
Expertos advirtieron que con el transcurso de la noche, el fenómeno seguiría aumentando su magnitud, además de ser acompañado por precipitaciones que durarían hasta la madrugada.