Cae número de pasajeros trasladados en Metro por primera vez desde 2009

Por Oriana Fernández G.

Según la empresa, en 2015 se registraron 661 millones de viajes, seis millones menos que el período anterior.

El inicio del Transantiago, hace nueve años, provocó un aumento explosivo de los viajes en el Metro, tendencia que desde 2009 se ha mantenido al alza. Sin embargo, según la cuenta pública de la empresa estatal, en 2015 por primera vez se registró una disminución de los traslados en seis años.

El reporte entregado ayer indica que la red trasladó a 661,2 millones de clientes en el último año, 6,7 millones menos que el período anterior, cuando se llegó a 667 millones.

De acuerdo a las cifras históricas de la estatal, en 2009 se produjo una caída en los viajes cuando se alcanzó 607,9 millones de personas trasladadas, situación que revirtió el año siguiente. Desde entonces, el número de pasajeros creció paulatinamente (ver infografía).

Al respecto, el presidente de la estatal, Rodrigo Azócar, sostuvo que aunque se pueden presentar cifras de este tipo recalcó que el tren subterráneo “transporta más pasajeros que el de Madrid, aunque en Santiago existen menos kilómetros de red”. El ejecutivo agregó que, según un estudio de imagen y posicionamiento, aumentó un 28% “nuestro indicador de prestigio y reputación”.

Evaluación

A pesar de esta caída en el número de usuarios transportados, el experto de la U. Diego Portales, Louis De Grange, manifestó que Metro ha tomado un rol más “importante” en el sistema capitalino, considerando que en comparación a los buses del Transantiago, “la caída de las transacciones llega sólo a un 1%, mientras que en los buses asciende a 5%, es decir, 50 millones de transacciones menos”.

De Grange añadió que este cambio en el comportamiento de los usuarios en el último año se debe a factores como la desaceleración económica, lo que lleva a que la población tenga una menor actividad. A esto se suma el aumento de personas que opta por circular en automóvil particular.

En esa línea Rodrigo Quijada, ingeniero en transportes y vocero de la organización Ciudad Viva, explicó que menor cantidad de personas en Metro se debería a que “la gente prefiere su vehículo porque el transporte público no es atractivo y se viaja hacinado e incómodo en el tren subterráneo”.

Pese al balance, Quijada dijo que la evaluación de los viajeros de Metro es positiva debido a su seguridad y, por sobre todo, a que “ofrece una certidumbre grande, las personas saben que se van a demorar”.

Respecto al impacto que tuvieron la seguidilla de fallas que afectó al sistema en 2014, Quijada estimó que sí afecta en calidad del servicio, “pero los atochamientos en hora punta representan la mayor molestia”.

En la cuenta pública de ayer, el presidente del Metro aseguró que el año pasado se produjo un estado operacional positivo y que la compañía logró autofinanciarse. Así, en septiembre pasado, obtuvo un resultado “mayor que cero”, debido a recaudación tarifaria y a ingresos por servicios anexos.

Además, se dio a conocer que la construcción de las Líneas 3 y 6 muestran un 54% de avance, mientras que la tasa de delitos llegó a 0,98 por millón de pasajeros.