Solo 22% de los subsidios entregados en los últimos cuatro años se convirtió en viviendas

subsidios viviendasPor Manuel Valencia.

Alto precio de terrenos y de construcción en Región Metropolitana y zonas mineras explican parte de la tendencia:

Producto de la baja aplicación, allegamiento en hogares ha mostrado crecimiento. Especialistas proponen reformar política habitacional con planes integrados.

La última encuesta de caracterización socioeconómica (Casen), de 2013, mostró que en Chile aún se requiere construir 459.347 viviendas para resolver el problema habitacional cuantitativo del país.

Aunque la cifra constata una baja respecto del anterior estudio, de 2011, los hogares allegados subieron y pasaron de 227.556 a 233.274.

Este incremento en las familias que viven con otras bajo un mismo techo coincide con la dificultad que están teniendo los subsidios del programa Fondo Solidario de Elección de Vivienda -destinos a grupos vulnerables- para poder ejecutarse.

Según datos entregados por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu), a través de la Ley de Transparencia, de los 98.424 subsidios entregados en los últimos tres años, solo 22.074 (22,43%) se han convertido en viviendas terminadas. Otras 31.461 (32%) están en construcción.

El resto, 41.112 beneficios (41,7%) aún no han derivado en el inicio de obras, aunque de ellos 12.016 fueron asignados durante el segundo semestre del año pasado. Según detallan desde el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, 4.980 están en proceso de contratación para el inicio de obras.

De acuerdo con el especialista habitacional José Astaburuaga, esta caída se debe a los altos costos actuales de construcción y de suelo. “Es muy difícil desarrollar proyectos habitacionales para satisfacer la altísima demanda acumulada de este subsidio en los grandes centros urbanos del país, especialmente en las regiones de Arica y Parinacota y Metropolitana”.

Añade que “el problema mayor de este tipo de soluciones habitacionales en grandes centros urbanos, es que, aunque dispongan de más equipamiento o metros cuadrados por vivienda, constituyen guetos debido a la gran cantidad de viviendas que concentran destinadas solo a sectores vulnerables”.

Slaven Razmilic, especialista en vivienda del Centro de Estudios Públicos coincide en que el alto precio de suelos en las regiones Metropolitana y de Atacama “hacen que el programa vaya lento especialmente en estas regiones”.

Otra evidencia llamativa que constató la Casen es que el 62,9% de las nuevas casas y departamentos adquiridos por los chilenos entre 2010 y 2013 corresponde a viviendas sin subsidio habitacional. Así, el beneficio estatal se utiliza completamente para adquirir solo el 11,5% de las soluciones habitacionales, siete puntos porcentuales menos del 18,6% que alcanzaban las viviendas subvencionadas en los años 90.

Según el consultor habitacional Mario Grandón, este cambio debiese generar una reflexión en torno a la continuidad del subsidio para grupos vulnerables, tal cual está diseñado hoy. “Está pensado para otra realidad. Debiese ya pensarse en el término del Fondo Solidario para Vivienda y contar con programas de integración con familias de segmentos medios. Eso evita que se sigan construyendo guetos de vivienda social tan complejos como los que se ven en la población Parinacota de Quilicura o Bajos de Mena”.

La modificación que plantea el experto ha comenzado a ser recogida por la actual administración. En 2014, con el objetivo de enfrentar los efectos de la desaceleración económica, se lanzó el programa de integración (DS 116) que entregó recursos para la construcción de 52 mil viviendas en todo el país, dentro de proyectos que integrarán viviendas para familias de clase media con otras destinadas a grupos vulnerables.

En ese programa, además, se buscó dar una solución a 36 mil familias que recibieron un subsidio habitacional en la modalidad “sin proyecto”, creada en el Gobierno anterior. De esos beneficios, aún persisten 3.777 (3,8%) sin una vivienda terminada ni en construcción.

“Ese trabajo de acompañamiento, orientación y búsqueda, ha permitido que al día de hoy nueve de cada 10 de esas familias estén vinculadas a un proyecto habitacional”, afirman desde el Minvu.

Modificaciones
En 2014, el Minvu aumentó el monto de subsidios complementarios para mejorar la ejecución del Fondo Solidario