Metro construirá y arrendará dos edificios en Providencia y Ñuñoa
Línea 6 supera 67% de avance, e inició esta semana la instalación de rieles:
En el centro, un nuevo inmueble albergaría instalaciones de la empresa. Modelo de alquiler busca allegar recursos a la firma.
Mientras en la superficie la construcción de los 37 kilómetros que totalizarán las dos nuevas líneas 3 y 6 del metro solo se evidencia en piques rodeados de paneles verde, a 30 metros bajo tierra la mayor obra de extensión del tren subterráneo ya toma forma.
En Ñuñoa, la primera estación de combinación contruida desde el inicio (donde cruzarán ambas líneas), ya es posible apreciar cómo será el recinto de 14 mil m2, el más grande del proyecto. En ese lugar, los 520 trabajadores avanzan en la instalación de los primeros 3.000 metros de rieles (de un total de 31.670 m) por donde circularán 15 trenes de la Línea 6. Para fijarlos, se utiliza un verdadero “tren del hormigón”, que se desliza por los rieles instalados y trae las mezclas desde el pique de calle Marathon, para inyectarlo en las zonas donde va extendiéndose la vía férrea.
Mientras la construcción avanza y ya totaliza un 67% para la Línea 6 (y un 55%, si se incluye la ejecución de la Línea 3), la empresa ya está ideando la construcción de tres edificios sobre las futuras estaciones Los Leones (Providencia), Ñuñoa (en Pedro de Valdivia con Irarrázaval) y Plaza de Armas (en la céntrica esquina de Catedral y Bandera).
Tal como lo adelantó “El Mercurio”, esos edificios serán arrendados, lo que permitirá allegar recursos adicionales a la empresa estatal. En el caso de Plaza de Armas, donde el municipio exige una construcción que evite que quede un sitio baldío, se analiza la instalación de oficinas corporativas de la propia compañía.
“Efectivamente, vamos a hacer un negocio con un privado para buscar la fórmula de arrendar o buscar un modelo de largo plazo para rentabilizar eso para Metro”, afirma el presidente de la empresa, Rodrigo Azócar.
Con este modelo, Metro profundiza estrategias comerciales que hoy utiliza, como la venta de retazos de terrenos o arriendos de locales comerciales, y sigue modos de financiamiento no operacionales utilizados en otros países que, incluso, capturan las plusvalías que generan las extensiones de metro en desarrollos inmobiliarios existentes.
En cuanto a la futura operación de las líneas 3 y 6, Azócar señala que la firma prepara lo que será el cambio cultural de usar un servicio completamente automatizado, puesto que en ambas no habrá boleterías atendidas (solo máquinas de recarga) y los trenes no tendrán conductor y serán manejados desde una central.
Con el propósito de evitar problemas operacionales por el desconocimiento inicial, habrá monitores en las estaciones por hasta dos años, para enseñar a los pasajeros a utilizar el servicio automático.
Nuevos trenes
Los 37 trenes (15 para la Línea 6 y 22 para la Línea 3) comenzarán a llegar en marzo a Chile e iniciarán pruebas en la vía desde junio.