Vecinos de San Miguel invitan a una velatón para evitar demolición de la Corte de Apelaciones comunal / 4 de marzo
En la comuna de San Miguel, en Santiago, el Poder Judicial planea levantar dos edificios de siete pisos cada uno para acoger las nuevas instalaciones de la Corte de Apelaciones en el sector. Sin embargo, llevar adelante este proyecto comprende la demolición de dos casas que datan de la primera mitad del siglo XX.
Ambas casonas, que están en la calle Álvarez de Toledo (Nº 980 y 1020) y que son de propiedad del Poder Judicial, no cuentan con una declaración de protección patrimonial, no obstante, los vecinos reconocen en ellas valores arquitectónicos, culturales e históricos que quieren preservar.
Es por este motivo que a través de diversas actividades de difusión impulsadas por la agrupación Patrimonio Santiago Sur y el medio Te Quiero San Miguel, están trabajando para evitar su destrucción a pesar que se inició el trabajo de cercado y demolición el pasado 26 de febrero siendo que no existen los permisos otorgados para ello.
De hecho, ayer, jueves 3, integrantes de Patrimonio Santiago Sur y del Consejo de Monumentos Nacionales, fueron a dejar una denuncia en la Dirección de Obras Municipales (DOM) para dejar constancia de esta irregular situación.
Junto con esto, una de las actividades ciudadanas es la campaña de recolección de firmas, que ya cuenta con más de 1.100 adherentes, y una segunda, es la velatón que se llevará a cabo hoy, viernes 4 de marzo, a las 20.45 horas, en el frontis de esta casa tipo torreón (Álvarez de Toledo Nº 980) que fue construida en 1948 por el español Joaquín Peralta Castel y diseñada por el arquitecto José Vives.
Este inmueble destaca por contar con elementos característicos de la arquitectura morisca que es visible, por ejemplo, en las gárgolas que sirven para evacuar las aguas lluvias y en sus bajo relieves típicos de las construcciones de la Europa Medieval.
La segunda casa que los vecinos desean conservar es en donde hasta hace unos días funcionaron las dependencias de la Corte de Apelaciones de San Miguel y en donde también se hará la velatón (Álvarez de Toledo Nº 1020). Este inmueble de estilo colonial data de 1930 y fue diseñada por el arquitecto Moisés Bravo y Toro, quien fue su propietario y concejal de San Miguel, en ese entonces regidor.
Además, Bravo y Toro fue quien diseñó otras obras de la comuna, como las viviendas sociales que están en torno a la plaza General Gacitúa.
El proyecto del Poder Judicial se puede ver en el siguiente afiche: