Congestión vehicular y colisiones durante retorno a Santiago

Por: M. Navarrete y J. Herrera.

Ayer se vivió el último retorno masivo a la capital de los cerca de 300 mil vehículos que se esperaban tras el fin del feriado largo de Semana Santa. El alto flujo automovilístico provocó tacos y colisiones en las carreteras, a pesar de las medidas para evitar la congestión, como la habilitación de más pistas para el regreso, junto con peajes a $1.000 en horas de la mañana, para incentivar el retorno temprano.

En la Ruta 68, donde se implementaron cuatro pistas de retorno, se vivieron varios episodios de automóviles detenidos por pana y colisiones. Además, durante la tarde se registraron desde infracciones, como la utilización de la berma peatonal, hasta una protesta de bocinas por la espera. “Entré a la Ruta 68 desde Algarrobo y había un taco en el que se avanzaba a 10 kilómetros por hora”, comentó Marcos Acuña, uno de los automovilistas. Debido a la alta congestión entre las 19 y 19.30 horas se levantó el peaje lateral hacia Zapata.

Otra de las carreteras afectadas fue la Autopista del Sol, en la que se habilitaron tres pistas para el regreso, donde hubo accidentes de tránsito y un extenso taco en el sector de Talagante. Las horas de espera provocaron reclamos entre los conductores que viajaban. Muchos, incluso, prefirieron volver a la Quinta Región.

Por otra parte, las rutas F-90, desde Algarrobo, y la Ruta 5, en La Ligua, también se vieron afectadas por las aglomeraciones y detenciones vehiculares.

De acuerdo a Carabineros, alrededor de 246 mil automóviles habían regresado a Santiago hasta las 18.00 horas, y se estimaba que 60 mil más vendrían de vuelta hasta la medianoche noche.

“Mantenerse en su carril, en su pista de circulación, no hacer adelantamientos, no transitar por la berma y estar atento a las condiciones de tránsito en el momento”, fueron las recomendaciones que desde temprano reiteró el coronel Enrique Monras, prefecto del Tránsito de Carretera. También informó que, a nivel nacional, se registraron 478 accidentes, un 31% menos que el año pasado, y 15 personas fallecidas.

Las principales razones de los decesos fueron la conducción no atenta y el manejo en estado de ebriedad. Al respecto, el oficial indicó que se realizaron 22.900 controles de alcotest, donde 332 personas fueron detenidas por conducir en estado de ebriedad y 145 infraccionadas por manejar bajo la influencia del alcohol. También se cursaron 2.608 multas por exceso de velocidad y 699 por no usar cinturón de seguridad o silla para menores en asientos traseros.