En tres años, el ex campamento minero de Chuquicamata sería abierto a la comunidad

Por Carlos Santana Flores.

Declarado Zona Típica en enero de 2015:

Este mes partió el trabajo para habilitar las instalaciones de la antigua ciudadela ubicada a 15 kilómetros de Calama.

“Esperamos con ansias poder volver al campamento y recordar lo vivido en nuestra infancia. Será una espera larga, pero al mismo tiempo se hará un trabajo responsable para rescatar nuestro patrimonio”, dice Miriam Bolados, presidenta de la Agrupación Hijos y Amigos de Chuquicamata, una de las agrupaciones que impulsó la campaña para que el campamento minero ubicado a 15 km de Calama -junto al yacimiento del mismo nombre- fuera declarada Zona Típica en enero de 2015.

En la actualidad, Codelco, el municipio de Calama, a través de la Corporación de Cultura y Turismo, además de las agrupaciones ligadas a Chuquicamata, trabajan en el proyecto para habilitar la ciudadela, cerrada en 2007 tras el traslado de los trabajadores a Calama, y volver a abrirlo a la comunidad.

Se trata del rescate de 42 hectáreas, que incluye el casco principal de edificios y las antiguas casas de los mineros.

Según Codelco, el plan estratégico para habilitar “Chuqui” contempla diferentes etapas, y ahora se está desarrollando un diagnóstico de distintos ámbitos: patrimoniales, operativos, económicos, comunitarios y el entorno turístico; luego de este análisis, se podrá conocer la situación actual del ex campamento, que operó durante 92 años, y lo que se necesita para su apertura permanente al público.

René Huerta, director de la Corporación de Cultura y Turismo de Calama, agregó que “se estima que en unos dos años esté listo el diagnóstico y se tarde un año más en habilitar los edificios que no tienen mayores daños”.

Sergio Parada, gerente general de la División Chuquicamata, explicó que “en una primera instancia, los turistas podrán ver el casco histórico (plaza y alrededores), lo que será una experiencia vivencial ya que se trata de un museo de sitio, que muestra edificios representativos de la cultura y patrimonio minero”.

En la zona protegida se encuentra un sector de edificaciones representativas y espacios públicos emblemáticos, como la Casa 2000, la plaza Los Héroes y el Centro Cívico. A ellas se suman la escuela D-54 “República de Chile”, el liceo B-10 América, el teatro “Variedades”, el auditorio Sindical, el Teatro Chile, el Club Chuquicamata, el Club Obrero, el estadio Anaconda y la Oficina de Pago. En el entorno están las antiguas poblaciones de trabajadores.

Al año el campamento es visitado por unas 30 mil personas y es abierto a la comunidad en dos fechas relevantes: el aniversario de Chuquicamata y Navidad.

42 hectáreas del  ex campamento minero de la Segunda Región fueron declaradas como zona protegida por el Consejo de Monumentos Nacionales.

1915 partió la  producción en el yacimiento de Chuquicamata, uno de los más antiguos del país.

24.000 personas  llegaron a vivir en la antigua ciudadela minera que alguna vez fue la más moderna de América Latina.