Proyecto de restricción por congestión genera rechazo entre parlamentarios

tacoPor: MANUEL VALENCIA.

Medida busca reducir “tacos” hasta en un 15%: Congresistas de distintos comités y bancadas argumentan que la medida estimulará la compra de segundos vehículos, por lo que piden fortalecer el transporte público.

En una estrategia que ha sorprendido por lo poco explícita, el Gobierno introdujo una indicación sustitutiva para establecer la tarificación vial como una medida para reducir la congestión vehicular. Tal disposición se haría efectiva, según han detallado miembros de la comisión Promovilidad (expertos convocados por la Presidenta Bachelet en 2014 para proponer una estrategia de reducción de “tacos”), con la creación de un pase diario que los automovilistas podrán pagar para eximirse de la prohibición de circular.

Como el Ministerio de Transportes será el encargado de determinar las zonas y los horarios en que se aplicará la medida, esa atribución abre la posibilidad de implementarla en zonas de alta congestión, lo que en la práctica da luz verde a una política de tarificación vial.

De acuerdo con el proyecto, restringir por congestión permitiría disminuir la saturación vial hasta en 15% e incrementar la velocidad del transporte público y privado hasta en 20%.

En Santiago, se estima que el 22% de la red vial tiene “tacos” críticos en horas punta, y de no aplicarse medidas aumentará al 29% hacia 2020.

A juicio del ministro de Transportes, Andrés Gómez-Lobo, ese pase “es muy importante para las pymes que tienen un vehículo y necesitan trabajar todo el día, o para una persona que en un momento particular necesita hacer un viaje de alta valoración como ir al aeropuerto y salir de Santiago. Es una forma de desincentivar la compra de un vehículo adicional cuando existe una restricción permanente”.

Dudas parlamentarias

Sin embargo, jefes de comités y de bancadas de distintos partidos políticos consultados por “El Mercurio” plantean dudas por la disposición.

Para la senadora Jacqueline van Rysselberghe (UDI), el proyecto “es el conformismo a la mediocridad, porque en el fondo en los países civilizados, para resolver la congestión, lo que hacen no es restringir el número de autos, sino construir más calles. Esto es regresivo y discriminatorio, porque en definitiva los de mayores ingresos van a tener dos o tres autos para movilizarse, y los más modestos no van a poder hacerlo”.

Su par Lily Pérez, de Amplitud, cree que la iniciativa “es un parche, como la generalidad de las medidas que han estado tomando los gobiernos. No se ha hecho nada por desconcentrar zonas urbanas, generar incentivos para que los jóvenes o las industrias se desplacen o se queden en regiones. Hay que incentivar que se regionalice, extender las líneas de metro para llegar a más lugares, que el transporte público tenga un rol más protagónico, entre otras medidas”.

Concuerda la diputada independiente Karla Rubilar: “Si es por congestión, impacta mucho más fuertemente sobre la clase media y personas de menos recursos, porque los que tienen ingresos que se lo permiten, compran un segundo o tercer vehículo. Incluso esta medida debiera aumentar el parque vehicular. Si la propuesta para que esta compra de otro vehículo no ocurra es tener un pase diario, también será regresivo, pues solo podrá ocupar esa posibilidad quien puede pagarla”.

Abordar un problema

La idea de legislar para reducir la congestión ha concitado respaldos y la voluntad de analizarlo. Manuel Antonio Matta (DC), presidente de la comisión de Transportes del Senado y uno de los tres autores del proyecto de ley -junto con los senadores Guido Girardi (PPD) y Manuel José Ossandón RN)- que fue modificado por Transportes, dice que “no necesariamente uno tiene el deber de respaldar esa indicación, porque no es un punto aceptado por todos. Tenemos que analizarlo”.

Añade que puede existir la alternativa del segundo vehículo. “Hay muchas familias en sectores centrales y altos que tienen no solo dos, sino tres o cuatro o cinco, pero no creo que este proyecto incentive eso (…) Estamos en situaciones en que hay que probar, porque hasta ahora los mecanismos no han resultado y estamos en dificultades”.

El senador socialista y representante del comité de su partido, Carlos Montes, añade que “estamos con un problema tremendamente serio de congestión que está provocando efectos de contaminación, lo que genera complicaciones al transporte público. Hay que discutirlo en detalle, pero me parece bien tomar decisiones de esta naturaleza, en distintos períodos del año. Hay zonas saturadas en todo Chile. Por eso, hay que asumirlo y discutir el detalle. Tenemos que buscar soluciones”.

SATURACIÓN VIAL
La medida permitiría disminuir en un 15% la congestión, según el proyecto.