Más de 100 mil personas ya están en La Tirana para celebrar a la “Chinita”
Mañana se espera que los visitantes sumen unas 250 mil personas para participar en la procesión: Pese a lo masivo y tradicional del evento, no está claro cuándo fue que llegó la icónica virgen de madera al país.
Es invierno, pero el sol es tan duro como en enero. Sin embargo, el sonido de los bronces y la chusca (polvo) que levantan los bailarines dan cuenta que la fe por la Virgen del Carmen (conocida como la “Chinita”) es inagotable en La Tirana.
Hoy, las calles del pueblo en que viven unas 800 personas, están inundadas de peregrinos. El obispado las cifra ya en más de 100 mil. El fin de semana llegarán a 250 mil. “Es un sueño para mí”, dice la presidenta del baile religioso de Peralillo-Elqui, Carolina Rojas. “No importa el frío, calor o cansancio”, confiesa Alex Aguirre, de la diablada Hermanos del Norte de Calama.
En La Tirana el protagonismo no pertenece a una sola imagen. Mauricio Serra, escultor del santuario, quien hace las restauraciones y murales del templo, afirma que aún no está clara la fecha exacta en que llegó la virgen más antigua al poblado, de 1,15 metros de alto, madera tallada y origen cusqueño, que sale del templo los días de procesión.
“Con esta imagen comenzaron los primeros bailes, que según los registros de la iglesia son de 1735”, dice Serra. Agrega “es una imagen débil, cuya última restauración se hizo en 2009, por lo que siempre es el llamado a no exponerla demasiado”. Pese a esto, en los últimos años ha sido sacada en más peregrinaciones: después del terremoto de 2014 recorrió todo el norte.
La otra virgen (mide dos metros y no se mueve del camarín), llegó el 16 de julio de 1886, encargada por un empresario salitrero a Italia.