Dique flotante está en riesgo de ser sacado de Valparaíso antes de que termine este año
Por Mauricio Silva.
Sería el fin de una tradición industrial de 159 años en el puerto:
El 31 de diciembre debería estar fuera de la poza de abrigo, pero su nueva ubicación ya no es tan segura frente a las marejadas.
El régimen de marejadas más frecuentes e intensas que se ha instalado en la zona central puede frustrar los intentos del consorcio dueño del dique flotante por mantener esa tradición industrial en Valparaíso, que se prolonga ya por 159 años. El dique debe salir de la poza de abrigo para no entorpecer la construcción del nuevo frente de atraque portuario, el Terminal 2. Pero su nueva ubicación, 700 metros en dirección hacia el muelle Barón y en zona desabrigada, ya no parece tan segura frente a los episodios de grandes olas, que a menudo adquieren características potencialmente destructivas.
“Recibimos una notificación oficial de la Empresa Portuaria de Valparaíso (EPV) de que debe salir de su actual posición antes del 31 de diciembre y dirigirnos al punto que nos designó el puerto como administrador”, dijo Hugo Barra, gerente de Sociber, consorcio chileno-español propietario del dique Valparaíso III. “No queremos ser un obstáculo al desarrollo del puerto y vamos a cumplir. Realizamos los estudios para la conectividad del dique a tierra desde su nueva ubicación, para su suministro eléctrico y de agua potable. Pero lo más importante es la evaluación de riesgo que encargamos a una empresa internacional”, agregó.
El estudio debe estar concluido en septiembre para determinar si en su nuevo lugar el dique puede enfrentar condiciones meteorológicas como las que han imperado en los últimos años. “De resultar negativo, deberá salir de Valparaíso. En estos momentos, está peligrando su presencia allí”, expresó.
En tal escenario, Sociber arrendará la infraestructura a Asmar, que lo remolcará a Talcahuano.
El gerente de EPV Gonzalo Davagnino dijo estar disponible para hacer más esfuerzos para coordinar una solución, pero que “los plazos son importantes” en la construcción del Terminal 2.
