Un año de atraso suma faena de 6,3 km en tramo clave de la Carretera Austral

Por Soledad Neira Farías.

Entre Vodudahue y Leptepu:

Errores en decretos de expropiación y retrasos en planes de manejo forestal explican lento avance de obras. En Palena exigen “un camino a Chile”, que esperan hace 30 años.

En Palena lo llaman “el camino a Chile”. Ese que, una vez terminado, permitirá por fin conectar por tierra a esa provincia -y a toda la Región de Aysén- con Puerto Montt y el resto del país hacia el norte.

“Es la prioridad número uno para nuestro desarrollo, para nuestra integración a Chile. Por mucho que los argentinos sean nuestros hermanos, no podemos seguir dependiendo de ellos para ir a Chile”, afirma el presidente de los alcaldes de Palena y jefe comunal de Futaleufú, Arturo Carvallo.

Sin embargo, ello no será pronto. Por lo menos un año de atraso tiene la construcción de un trecho de 6,3 kilómetros -de un total de 64,9 km en línea recta- del tramo faltante de la Carretera Austral que se extiende entre Pichanco y Caleta Gonzalo. Una situación que el ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, atribuye a problemas en los planes de manejo forestal, “dificultades que han tenido el desarrollo de los tramos nuevos de la Carretera Austral, no solo en ese lugar”.

Explica que para resolverlo acordaron con Conaf un procedimiento del cual darán cuenta al Congreso, por cuanto es una glosa especial que está en la Ley de Presupuesto”.

Con todo, en la práctica el atraso se originó desde antes, pues los decretos de expropiación que presentó inicialmente el MOP fueron objetados por la Fundación Pumalin por errores en los cálculos de la superficie a expropiar, según confirmó la entidad durante las tratativas.

Los trabajos -ejecutados por el Cuerpo Militar del Trabajo del Ejército (CMT)- se iniciaron con la instalación de faenas en septiembre de 2014, poco después de la firma de un convenio con el MOP por $4.700 millones que fijaba un plazo de 20 meses para las obras.

Pero con meses de desfase y sin planes de manejo forestal aprobados, el contratista recibió solo la mitad del terreno, pues en el intertanto la otra mitad cambió de dueño cuando Douglas Tompkins, el fallecido ecologista y férreo opositor a la construcción de este camino, vendió la propiedad a otro particular, por lo que todo el proceso expropiatorio de ese paño volvió a fojas cero.

“Estamos trabajando en los terrenos que están con toda su tramitación al día y en diciembre entregaremos esas obras”, explica el jefe del CMT-Ejército, coronel Marco Arnechino.

Los senadores Iván Moreira y Rabindranath Quinteros, integrantes de la Comisión de Zonas Extremas, coinciden en la necesidad de darles urgencia a las obras. El primero pide destinar “más recursos para revertir el retraso”. “Hay un compromiso de unir Chile por Chile”, recalca el segundo. Undurraga responde que “si es necesario ajustar los plazos para el desarrollo de la obra, los ajustaremos”.

Larga historia

Este contrato era una gran esperanza para unos 150 mil habitantes de Aysén y Palena, quienes esperaron por casi 30 años que se reanudaran las faenas, interrumpidas en 1986 por razones técnicas y económicas.

Sin embargo, desde la firma del convenio en 2014 hasta ahora, el avance ha sido de 1,5 km por año y de acuerdo al trazado estimado por el MOP para cubrir el tramo, faltan 97 km. “Hay que ser realista, a esta velocidad lenta… va a ser en próximas generaciones”, dice resignado el alcalde de Hualaihué, Fredy Ibacache, quien desconfía de que llegue a haber un camino.

“Se ha atrasado demasiado, ya no está Tompkins y se demoran en temas administrativos. Eso perjudica el avance de la zona”, opina Carvallo. Si bien valora la ruta bimodal, que combina tramos terrestres y tres barcazas entre Puerto Montt y Chaitén, “seguimos dependiendo de las condiciones climáticas. No es una solución, es un parche”.

10 horas

demora el viaje en bus entre Puerto Montt y Chaitén, por la ruta bimodal, que incluye tres cruces marítimos, para una distancia total de menos de 300 km.

28 años

estuvieron detenidas las obras del tramo faltante, debido a los altos costos y las dificultades técnicas del trazado, bordeando los fiordos.

6,3 km

que equivalen al 10% del trazado en línea recta del tramo faltante, es el contrato en ejecución.