Expertos: licitaciones eléctricas marcan punto de inflexión
Proceso generará cambios en los planes de desarrollo de las generadoras, aseguran.
La última licitación de suministro eléctrico, la mayor subasta realizada en Chile para clientes regulados -hogares y pymes-, superó varios registros. Los 12.430 GWh se adjudicaron a un precio promedio récord de US$ 47,6 por MWh, valor que supone una baja del 40% respecto de la licitación de octubre de 2015 y de 65% en comparación con 2013.
Un hito, también, fue la participación en el proceso de 84 empresas nacionales y extranjeras. El resultado de la subasta permitirá, según el gobierno, rebajar un 20 % las cuentas de luz a partir de 2021.
Para la industria y los expertos, el resultado de la licitación marca, además, un punto de inflexión para el sistema. “Generará cambios en la tendencia de lo que venía pasando en el sector en los últimos ocho o más años, cuando se hablaba de falta de inversión y de precios altos. Lo que hemos visto en el pasado no se va a repetir en el futuro”, asegura Ramón Galaz, director de Valgesta.
La licitación, a su juicio, cambiará el mercado de manera relevante. “Esta nueva condición del sistema obliga a revisar los planes de desarrollo de las generadoras y las fórmulas de comercialización”.
Definiciones regulatorias
El punto de inflexión, agrega Galaz, se genera a partir de las definiciones regulatorias que ha habido, “con un buen diseño, pero, además, con una buena implementación”, destaca.
María Isabel González, gerenta general de Energética, coincide. “La energía ofertada fue siete veces la adjudicada, lo que demuestra que hay mucho interés por desarrollar proyectos”, asevera.
En su opinión, una serie de cambios confluyeron para destrabar los proyectos y dar certeza a los inversionistas. Uno de ellos es la flexibilidad en el mecanismo de licitaciones. “El cambio a la ley permitió que las licitaciones se hicieran con cinco años de anticipación en vez de tres, lo que dio tiempo para desarrollar los proyectos”, destaca. Asimismo, añade, se flexibilizó el mecanismo para poder postergar la entrega de suministro y se distribuyó la licitación en bloques horarios, “lo que facilitó la participación de las renovables y permitió la entrada de nuevos actores internacionales”.
La ley de transmisión, que simplificó el sistema de precios, y la ley de concesiones, promulgada en el gobierno de Piñera, también han sido favorables para el sistema, menciona Renato Agurto, socio de Synex. “En general, el ambiente en el sector es favorable, se acabó la trabazón de proyectos de generación que provocó precios muy altos”, dice. Aunque, aclara, también hay factores externos que han contribuido a despejar el escenario.
“En esta situación de baja de precios, han aportado la caída de los costos de los combustibles, como el carbón, el petróleo y el gas natural”, enumera. También, añade, ha jugado a favor la baja de los costos de las tecnologías renovables no convencionales.
En opinión de las generadoras, quedan desafíos por delante. “Los cuellos de botella de transmisión siguen existiendo, al menos hasta 2018, y el desafío de desarrollar proyectos de manera sustentable con las comunidades, que afecta más a los proyectos eólicos que a los solares, también son cuellos de botella (o “desafíos”) que deben resolverse”, plantea Claudio Seebach, vicepresidente ejecutivo de la Asociación de Generadoras.