Villa O’Higgins comienza a recibir ayuda, pero el clima y geografía complican despeje
Aislada hace nueve días por un gigantesco aluvión que cortó el camino:
Helicóptero del Ejército ingresó víveres y mantendrá un puente aéreo entre el poblado y Cochrane, lo que genera tranquilidad entre sus habitantes.
“Prioridad uno, los que tienen problemas médicos. Luego, los que van Cochrane”, afirma un militar con una lista en la mano para ordenar el embarque del primer grupo de personas que salió en un helicóptero del Ejército, la tarde de ayer, desde Villa O’Higgins.
El poblado de 650 habitantes está aislado desde hace nueve días por un alud de barro, enormes rocas y troncos que borraron unos 200 metros de camino, 40 km al norte de la localidad. Anoche, el alcalde Roberto Recabal reafirmó que el clima dificulta el despeje “y estamos chequeando la posibilidad de un nuevo rodado”.
En la tarde, en la losa del aeródromo, una treintena de personas buscaba cupo en el Cougar que solo un rato antes había llegado con dos toneladas de carga, incluyendo víveres, medicamentos para la posta y nueve pasajeros. “El avión subvencionado estaba reservado por un mes. Teníamos pocas expectativas de poder regresar”, pero tras una escala en Cochrane, el helicóptero “recogió a cuatro pobladores que venían con sus víveres y estaban ahí más de una semana”, cuenta Alfredo Runín, quien llegó a la villa procedente de Coyhaique.
La aeronave y su tripulación “estarán disponibles el tiempo que sea necesario. Estamos contentos de darles conectividad con este puente aéreo”, explicó el general Fernando San Cristóbal, comandante de la IV División del Ejército en Aysén, quien viajó a la comuna junto al gobernador de Capitán Prat, Humberto Marín.
“Le ofrecimos al señor intendente toda la colaboración, incluido el Cuerpo Militar del Trabajo que está completamente a disposición, aunque (Vialidad-MOP) está trabajando a la máxima capacidad. Es un sector muy angosto”, explica San Cristóbal.
Marín asegura que están trabajando con el MOP para despejar el camino. “Pretendemos en unos cuatro días tener un paso parcial, pero el aluvión es bastante grande. Estuvimos en terreno y es complejo”.
Marin agrega que “junto con el apoyo del Ejército aumentamos los vuelos subvencionados y esperamos que pueda llegar un Hércules de la FACh”.
La odisea del retorno por territorio argentino”Doce horas. Cinco adultos y un niño, apiñados en una camioneta, con viento y nieve… Una verdadera odisea. Vadeamos el río Carrera con el agua tapando las ruedas”. Así describe Marcus Campos del duro viaje que hizo para regresar a Villa O’Higgins desde Cochrane, donde esperaron tres días.
Viajaba con su esposa, pero “se sumaron otras personas. Aquí es así, hay que ayudarse”, explica. También detalla que “salimos por el Paso Baker hacia Argentina, pero en la frontera nos pegaron la desconocida, nos hicieron descargar todo. Nos pilló la noche y cuando cruzaba los arroyos, todos cerraban los ojos. La alegría fue grande cuando nos recibieron los carabineros de Paso Mayer”, recuerda Campos.