Usuarios detallan las ventajas del modelo de auto compartido
Por O. Fernández/G. Sandoval.
Día Mundial Sin Automóvil promueve nuevas formas de traslado sustentables.
Contaminación, un precio de la bencina al alza y tacos interminables son algunos de los costos que enfrentan los conductores cuando utilizan su vehículo diariamente. Por ello, de manera simbólica, en Islandia y Francia comenzó a celebrarse el Día sin Auto los 22 de septiembre, fecha en que se promueve el uso de transportes alternativos y limpios en las ciudades.
En este contexto, una tendencia que se ha instalado es el sistema para compartir el automóvil -carpooling- con otras personas que circulan por la misma ruta, a cambio de un pequeño pago en dinero, un aporte por el combustible o bien peaje.
La firma A-Dedo comenzó hace tres años a funcionar como una plataforma en que se contactan los interesados. Bernardo Bacigalupo, vocero de la empresa, asegura que poseen 11 mil usuarios inscritos en diversas modalidades.
La fórmula ha generado interés en diversas compañías para que exista una red de traslados para los funcionarios que laboran en el mismo lugar. Así, A-Dedo cobra por la aplicación desde US$ 500 a las empresas que quieran implementarla.
Este sistema es utilizado por Falabella, las clínicas Santa María y Dávila, además de las universidades de Chile, Católica, Adolfo Ibáñez y Los Andes. Está pensado para que los funcionarios ahorren en pasajes, lleguen en menor tiempo a sus labores y con mayor comodidad.
Además, esta firma ofrece organizar el uso de estacionamientos en las empresas, donde tienen preferencia los pilotos que lleven a más pasajeros.
Las redes sociales también promueven viajes. Es el caso del grupo Santiago-Viña en Facebook, donde un traslado vale $ 1.500. Un pasaje en bus para ese mismo tramo cuesta el doble.
Colegios
También ha tomado fuerza que los padres de algunos colegios compartan sus vehículos cuando los alumnos viven cerca. Angela, apoderada de un colegio de La Reina, señala que los padres hacen turnos para ir a buscar a los menores. “A cada uno le toca un día. Esto es útil, porque no se debe pagar el transporte escolar y, además, sirve mucho a los padres que tienen poco tiempo por la carga de trabajo”, dice.
María Luisa Sotomayor, apoderada del Colegio Saint George’s, cuenta que ha tenido una buena experiencia: “Lo más importante es que entre las familias nos ayudamos. Cuando yo o mi marido viajamos por trabajo, sabemos quiénes son los padres que pueden ayudar para ir a buscar a los niños al colegio”.
Sin embargo, otras plataformas dedicadas a promover este modelo no han tenido el éxito esperado. Es el caso de Compartirauto.cl, que no ha logrado que sus suscriptores aumenten. Alberto Escobar, gerente de Asuntos Corporativos del Automóvil Club de Chile, sostiene que muchos de estos programas no dan resultado en Chile porque “falta confianza. Todavía las personas prefieren ir solas, sin llevar a nadie”.
Llaman a usar bicicletas
Una persona que circula en una camioneta 4×4 que funciona a diésel contamina lo mismo que un vagón entero del metro que lleva a decenas de viajeros.
Por ello, el Ministerio de Medio Ambiente llamó ayer a que las personas utilicen un transporte más limpio durante esta jornada, como la bicicleta o caminatas.
Por ello, el municipio de Santiago anunció ayer que se construirán 15 kilómetros de ciclorrutas en calles como Dieciocho, Marín, Club Hípico, Almirante Latorre, Brasil, Lastarria, José Miguel de la Barra y Esmeralda, entre otras. En esa comuna se ubican las vías exclusivas para ciclistas más concurridas de la capital: Teatinos y Rosas.
Una de las firmas que ofrece el sistema de bicicletas públicas es Bike Santiago, con una flota de dos mil vehículos, ubicados en 200 estaciones dentro de la ciudad.
