Políticas públicas, descentralización y alianza social: la ruta para bajar pobreza en La Araucanía
Es la región que tiene el mayor índice de vulnerabilidad del país
Amplias reacciones se generaron tras los resultados de la encuesta Casen 2015. Autoridades, parlamentarios, dirigentes gremiales y líderes religiosos plantean sus ideas para revertir este escenario y generar desarrollo para todo el territorio.
Fomentar más y mejores políticas públicas; descentralizar el Estado, dando mayores facultades a las regiones, y generar una alianza que involucre al mundo social, político y económico son los caminos que autoridades regionales, ex personeros de gobierno y líderes del mundo empresarial proponen recorrer para que La Araucanía deje de ser la región más pobre del país (23,6%), como lo mostró la última encuesta Casen.
El intendente Andrés Jouannet sostuvo que los resultados de la última medición lo dejan contento, pero no satisfecho, y que las políticas públicas de los últimos años influyeron en la disminución de los índices de pobreza en la región. “Debemos estar contentos, porque bajamos 4,3 puntos porcentuales desde la última Casen; es decir, de un 27,9 que teníamos, a un 23,6 en términos de ingresos”, dijo. “Pero -aseveró- efectivamente seguimos siendo la región más pobre, y eso es lo que nos preocupa. No somos, por ejemplo, la región número siete, y es muy difícil llegar por obra y gracia a eso”.
Como desafíos pendientes en políticas públicas, Jouannet dijo que deben aumentar los subsidios rurales, ya que “con eso atacaremos donde hoy día tenemos más concentrada la pobreza, que es en el ámbito rural”.
José Torga, presidente de Corparaucanía (Corporación para el Desarrollo Productivo de La Araucanía), dijo que los resultados “eran previsibles”, dada la falta de inversión existente en la zona y porque la región no puede superar su origen histórico, ya que partió “muy atrás con respecto al resto y por lo que no ha logrado avanzar con velocidad, tanto por problemas estructurales y otros relacionados con los conflictos que como población no hemos logrado resolver”.
Torga precisó que la violencia rural es uno de los motivos que contribuyen a mantener los niveles de pobreza, dado que así se aleja a la inversión privada. “El conflicto contribuye a que la pobreza se mantenga. De la pobreza surgen la desigualdad, la falta de oportunidades y un ambiente en el que es más difícil conseguir que haya un nivel de actividad”.
Para afrontar esta problemática, el dirigente dijo que los mundos público, empresarial y social deben hacer un esfuerzo conjunto para terminar con estos índices de vulnerabilidad. “Nos falta una alianza para el desarrollo y búsqueda de oportunidades para todos”, acotó.
El diputado Fuad Chahín (DC) aseveró que los resultados son malos “y que demuestran que se requiere un esfuerzo adicional, ya que con las políticas públicas que se implementan en el resto del país, en la región no vamos a resolver este tema”.
Su par José Manuel Edwards (RN) dijo que se debe erradicar la violencia rural de la zona y aumentar las posibilidades de empleo, fortaleciendo áreas como el turismo y agricultura, “porque mientras nadie se atreva a invertir en la región, por cuanto existe violencia, no van a entrar nuevos capitales privados”.
Un Estado obsoleto
“La pobreza es un caldo de cultivo para muchos males, incluso para gente que cree que el camino es demasiado largo para superarla”. Esta frase marca la explicación que da el ex intendente Francisco Huenchumilla a los resultados que la región obtuvo en la Casen, en donde si bien dijo que hubo un retroceso de la pobreza -en comparación con años anteriores-, aún existen tareas pendientes. “Aquí tenemos un conflicto político que no ha sido resuelto. Aquí siguen siendo los sectores rurales y las comunidades indígenas las más pobres”. Más tarde, y vía Twitter, acotó: “La pobreza multidimensional bajará de verdad cuando la educación, la salud y la previsión dejen de ser tratados como mercaderías”.
Para afrontar este escenario, a juicio de Huenchumilla, es necesario descentralizar y generar un aparato público más eficiente: “Tenemos un Estado obsoleto, del siglo XIX, y ahí tenemos una tarea pendiente”, dijo.
“La descentralización, la creación de mayores municipios, y dar mayores facultades de los gobiernos regionales son muy importantes para atacar la pobreza multidimensional”, puntualizó la ex autoridad regional.
También en esa línea, el obispo de Temuco, monseñor Héctor Vargas, afirmó que el “centralismo agobiante” afecta el desarrollo de las políticas públicas y que “si cada región tuviera la posibilidad de tener más autonomía para llevar adelante los proyectos y ser más pertinentes a la hora de ver en qué se gastan los recursos, es probable que el resultado sea un poco distinto”.
El obispo puntualizó que “no siempre lo que se legisla tiene que ver con las necesidades reales y urgentes de la gente”.
”La pobreza acumula mucha rabia y mucha frustración en la gente. Y es caldo de cultivo para que jóvenes se vayan abriendo camino en la delincuencia”.
FRANCISCO HUENCHUMILLA, EX INTENDENTE DE LA ARAUCANÍA
”Los resultados son lamentables y previsibles, porque nos damos cuenta de que estamos con problemas muy serios”.
MONSEÑOR HÉCTOR VARGAS, OBISPO DE TEMUCO
”Sabemos que la reducción de la pobreza no se hace por obra y gracia. La baja actual fue por políticas públicas”.
ANDRÉS JOUANNET, INTENDENTE DE LA ARAUCANÍA
”Nuestra región requiere de un esfuerzo adicional, de un nuevo trato, de una ley Araucanía que cuente con herramientas permanentes”.
FUAD CHAHÍN, DIPUTADO DC
”El conflicto contribuye a que la pobreza se mantenga. De la pobreza surgen los problemas que tenemos, la desigualdad, la falta de oportunidades”.
JOSÉ TORGA, PRESIDENTE DE CORPARAUCANÍA
29,2% es el porcentaje de personas en La Araucanía que viven en situación de pobreza multidimensional. En 2013 este indicador era de 28,5%.
23,6% de las personas en esta región viven en situación de pobreza por ingresos. La cifra más alta del país.
7% de hogares en situación de pobreza extrema por ingresos posee actualmente La Araucanía.