“En lo esencial, la reconstrucción del 27/F va a quedar cerrada este año”
Por Karen González T.
Paulina Saball, ministra de Vivienda y Urbanismo.
Aún hay 365 soluciones habitacionales que no han iniciado obras luego del terremoto de 2010. En el norte, gran parte de los proyectos finalizarán en 2017.
Más de $ 1.902.322 millones (US$ 2.899 millones) contempla el presupuesto del Ministerio de Vivienda para el 2017 presentado la semana pasada al parlamento, con un incremento del 1,1% respecto de este año. Más de 20 mil nuevos subsidios, la continuación del Programa de Integración Social y Territorial, y la culminación de los procesos de reconstrucciones posterremotos están entre las prioridades.
¿Cuál será el foco de las programas habitacionales en 2017?
Con el presupuesto 2017 nos hemos propuesto construir 110 mil viviendas nuevas y 112 intervenciones con el Programa de Protección del Patrimonio Familiar. Además, tendremos en ejecución 28 parques urbanos y 166 kilómetros de ciclovías comprometidos como medida presidencial, así como 235 barrios intervenidos con el Programa Quiero Mi Barrio.
También se destinaron recursos para continuar con el Programa de Integración Social…
Tenemos contemplado, en 2017, seleccionar 25 mil unidades con este programa, que se adicionan a las que se han venido ejecutando. Ya asignamos 44 mil viviendas en 2015 con el Programa Extraordinario de Reactivación Económica, más las 37.500 viviendas del Programa de Integración anunciado por la Presidenta el 21 de mayo pasado. Así, a finales del gobierno de la Presidenta Bachelet, tendremos en ejecución más de 107 mil viviendas de integración social.
¿Aumentan la cantidad de subsidios?
Se contempla un total de 207.679 subsidios, de los cuales casi 87.679 son para atender el déficit cuantitativo y 120 para atender al déficit cualitativo.
¿Cuándo se dará por terminado el proceso de reconstrucción del terremoto del 27/F?
En lo esencial, la reconstrucción del 27/F va a quedar cerrada este año. Quedan 365 soluciones de unidades habitaciones que no han iniciado por problemas de propiedad con los terrenos, pero es residual si se compara con las 224 mil viviendas iniciales.
En el norte, ¿cuáles han sido las principales dificultades?
En cuanto a la reconstrucción del Norte Grande, en Arica y Parinacota vamos a terminar en enero y febrero con la entrega de viviendas en Camarones. En Tarapacá vamos a terminar los conjuntos habitacionales de reposición que tenían daño y todos los trabajos de reparación el próximo año. Para 2018 quedará una parte de las soluciones de construcción en sitio residente (sitio propio), ya que en Alto Hospicio ha habido que reconstruir las viviendas y reparar los suelos, y además, porque las empresas que trabajan son pequeñas, con capacidad de ejecución limitada.
En cuanto a Coquimbo, se han levantado algunas críticas por la lentitud en la asignación de subsidios…
Las obras urbanas que comprometimos como medidas de mitigación van a terminar su ejecución en 2017: las vías de evacuación de La Serena, Coquimbo y Tongoy; la costanera Salvador Allende en Los Vilos; los muros interviviendas y los muros asociados a plataformas viales. La única obra de mitigación que no se terminará es la costanera de Coquimbo, que está asociada a la construcción del muro verte olas que está realizando Obras Públicas. Las obras urbanas, como plazas, paseos y calles, todas estarán terminadas también en 2017. Y en materia de viviendas, hasta agosto, el 64% de los subsidios de reparación y reposición habían sido asignados a proyectos, y esperamos cerrar este año con el 30% de las soluciones habitacionales terminadas.
Campamentos
¿Reconocen el aumento del número y familias que viven en campamentos?
Nosotros trabajamos con el catastro de 2011 y desde ahí ha habido nuevas ocupaciones. Sabemos que hay tres o cuatro regiones con aumentos significativos, y cada una de esas situaciones tiene una forma de abordaje. En Antofagasta construiremos más de ocho mil viviendas sociales para abordar el déficit habitacional, y en Tarapacá, más de cuatro mil. Mientras que en Valparaíso estamos gestionando la urbanización de los campamentos.
De estas, ¿cuántas viviendas estarían destinadas a campamentos?
Hemos buscado atender toda la demanda habitacional y en Antofagasta ya hemos cerrado 13 y quedan 15 y todos van a terminar en este gobierno. Los otros son ocupaciones irregulares y no todas las familias pueden acceder: el 12% de las familias en campamentos formados después de 2011 no cumplen con los requisitos y un 74% son inmigrantes, por lo que no todas van a querer residir definitivamente en Chile. Entonces, no solo se soluciona con una nueva vivienda, sino flexibilizar el acceso por otras vías como el subsidio de arriendo.
