Crecen los proyectos de hoteles que se encuentran paralizados
Orientados a segmentos altos, con elevados montos en infraestructura:
El estancamiento económico que atraviesa el país es una de las principales causas que ha frenado a los inversionistas.
La hotelería se ha mostrado como una de las actividades más resilientes al estancamiento económico que afecta al país. Los favorables resultados de la industria del turismo hablan por sí solos: en el primer semestre, la llegada de turistas a Chile aumentó un 28% en relación con el año pasado.
Pese a lo anterior, diversos proyectos hoteleros -sobre todo en segmentos altos y de lujo- se encuentran paralizados, esperando un mejoramiento de las condiciones económicas del país. Y eso no es privativo de Santiago. La desaceleración económica también influyó en los proyectos de inversión fuera de la capital, situación que se acentúa con más fuerza en el norte del país, debido a la caída de la actividad minera.
Fuentes del sector indican que en Santiago se encuentran paralizados un hotel de lujo en Las Condes, tres en Providencia (uno de cinco estrellas y dos de cuatro estrellas), dos de cuatro estrellas en Vitacura y uno de cuatro estrellas en Ciudad Empresarial de Huechuraba. Señalan que suman cerca de dos mil habitaciones y que no tienen marca, ya que se encuentran en etapa de estudio.
Hilton y Territoria a la espera
Cercanos a la industria afirman que se encuentra paralizado un hotel de la marca Garden Inn, de la cadena Hilton, en Vitacura. Agregan que hace poco se reanudó la construcción del complejo inmobiliario que desarrolla el Grupo Territoria en la intersección de Apoquindo y Encomenderos, donde en una de sus torres se instalaría un hotel de la lujosa marca Sofitel, de la cadena francesa Accor. Sin embargo, tanto en Hilton como en Territoria indicaron que no tienen proyectada la construcción de hoteles en esos sectores.
Otro de los proyectos que se encuentra momentáneamente detenido es el hotel Innside, de la cadena española Meliá, ubicado en la calle Bucarest de Providencia. El presidente ejecutivo de Empresas Armas, Cristián Armas, quien participa en el desarrollo del proyecto, asegura que, antes de comenzar, se requiere: revisar las condiciones con las marcas, esperar un rebote de la economía del país y un mejor contexto político.
En el norte de Chile, Copiapó lidera la paralización de proyectos hoteleros con siete, Antofagasta le sigue con tres y Calama, con dos.
Incertidumbre y costos, factores determinantes
Al momento de desarrollar un proyecto hotelero, los inversionistas deben situarse en un escenario futuro a un plazo de dos o tres años, dependiendo de la escala del establecimiento. El presidente de Hoteleros de Chile, Colin Turner, explica que los factores determinantes de la detención de los proyectos son dos.
El primero de ellos se vincula con la incertidumbre sobre el desarrollo futuro de la demanda -que está ligada a la situación económica interna y externa del país- y el segundo se relaciona con una baja importante de las tarifas debido al ingreso de una importante cantidad de habitaciones en los últimos años, lo que genera que las inversiones dejan de ser tan atractivas.
Además, Turner explica que “los proyectos que se están deteniendo son aquellos con una alta inversión en infraestructura, porque tienen un componente de riesgo mayor; los que requieren una inversión menor han seguido su curso”.
En tanto, el consultor en proyectos hoteleros Pablo Ramírez coincide con Turner y señala que el costo de construcción es una variable fundamental a la hora de invertir. Ramírez sostiene que es muy delicado evaluar una inversión en el rubro, debido a la gran cantidad de variables que existen y a la necesidad de adelantarse al escenario futuro.
“Si se mantiene la economía a un crecimiento bajo, la ocupación hotelera no remonta y aún persisten fluctuaciones de la tarifa, entonces los inversionistas podrían ajustar el proyecto a una nueva categoría de hotel y disminuir el número de habitaciones”, explica Ramírez.
Agrega que “eso podría rentabilizar mejor su inversión, ya que el hotel sería más eficiente y estaría más ocupado”.