Transantiago: aunque evasión anota récord de 30,2%, multas cursadas caen a nivel más bajo en dos años
Por Manuel Valencia y José Joaquín Suzuki.
Estudio advierte relajo en fiscalizaciones del Gobierno.
Según proyecta el análisis, este año se cursarán 65.530 infracciones, 32 mil menos que el año pasado. Transportes atribuye la baja a los nuevos planes focalizados de control.
Durante el primer semestre de este año, más del 30% de los usuarios del Transantiago viajaron en los buses del sistema sin pagar su pasaje. Una cifra que llegaría a 1,3 millones de pasajeros diarios que se transportan por la capital en forma completamente gratuita.
Pese a los diversos planes anunciados por el Gobierno, esta patología para el sistema no logra menguar. Y, por el contrario, sigue un curso ascendente. Por esta razón, según el Ministerio de Transportes, el sistema pierde hasta US$ 130 millones al año, lo que termina por empujar a una eventual alza de subsidios estatales o un incremento de la tarifa para compensar la continua merma de recursos para las empresas operadoras.
En medio de este escenario, podría pensarse que las multas que cursa el Gobierno aumenten. Sin embargo, la tendencia es la opuesta: según un análisis realizado por la empresa Alto Evasión, hasta julio de este año se han cursado 38.226 infracciones. Con ese ritmo, considerando la cantidad de fiscalizadores de la Región Metropolitana (257) y la cantidad de controles de procedimientos que practican en un día, se proyectan 27.304 más, con lo cual el 2016 cerraría con 65.530, la cifra más baja desde 2013, y una reducción en 32.237 multas respecto de las 97.767 cursadas en 2015 (32,97% menos).
“Esta situación es preocupante, porque el año pasado, cuando hubo menos evasión, se cursaron muchas más multas. Se puede ver una relación entre la inspección y el aumento de la evasión. Faltan más controles”, explica Felipe Clark, gerente de operaciones de Alto Evasión.
El Gobierno admite que existe una baja, pero la atribuye a los planes más focalizados de control. “Nuestras metas están más asociadas a la cobertura y pasajeros fiscalizados, no en función de las multas. Seguramente esto se debe a los operativos. En las primeras semanas se observan comportamientos normales de evasión, pero el número baja mucho después porque la probabilidad de ser controlado aumenta”, explica Paula Flores, secretaria ejecutiva del programa de fiscalización del Ministerio de Transportes.
¿Por qué, entonces, esos controles no se traducen en una menor cifra de pasajes impagos? Flores responde: “La evasión no solo tiene como causa la baja fiscalización. Hay otros factores que la provocan. No solo con fiscalización en la calle vamos a terminar con el problema”, afirma.
Para el especialista en transportes de la UDP, Louis de Grange, “se requiere con urgencia aumentar los fiscalizadores, además de una inyección importante de recursos y voluntad política. Por ejemplo, para instalar torniquetes en todos los buses o que haya sanciones sociales para los evasores. Eso debe estar en los contratos de la próxima licitación, pero es difícil que se incluya”, dice.
Rodrigo Troncoso, experto en transportes de Libertad y Desarrollo, añade que en las propuestas de la nueva licitación “los que van a competir debieran abrirse a la posibilidad de que ellos hagan propuestas de cómo involucrar al conductor en la fiscalización y hay muchas formas de hacerlo”.
Reincidentes
El análisis también muestra el nivel de reincidencia entre los multados: de 67.674 personas multadas desde el 2013, el 77,83% han sido infraccionados una vez, pero el 22% restante acumula dos o más citaciones al juzgado de policía local (16,45%, dos veces, y 5,73% lleva tres o más partes).
Meta 2016
Transportes apunta a llegar a 1.800.000 pasajeros fiscalizados este año y subir la cifra en 20% hacia 2017. Evasores con antecedentesEl 7,75% de los multados tiene una condena por algún delito o falta , según datos proporcionados por los juzgados. Entre ellos, el 26% tiene antecedentes por hurto simple, 14% por delitos de robo, 7% por lesiones, 5% por consumo de estupefacientes y el 4% fue sorprendido portando armas cortopunzantes. Rodrigo Troncoso, especialista de Libertad y Desarrollo, dice que esta información abre interrogantes sobre el tipo de política pública adecuada para enfrentar la evasión. “En el mismo país y con personas más o menos parecidas, la evasión era mucho más baja antes y ha ido aumentando de forma sostenida”, afirma.