Completan restauración del Club de la Unión de Valdivia
Por Óscar Riquelme Bracho.
Se invirtieron $160 millones para remodelar el interior:
El inmueble de 2.000 m {+2} fue edificado en 1916, y en sus salones se ha escrito parte de la historia de la ciudad.
“En estos salones han ocurrido hechos importantes de la historia de Valdivia, y merecen ser resguardados, para que quienes lo visiten sepan en qué lugar se hallan”. Así explica Eduardo Schild, empresario de la zona, la importancia que poseen los casi 2.000 metros cuadrados de construcción del tradicional edificio que alberga a uno de los clubes sociales más antiguos del país: el Club de la Unión. El mismo que acaba de culminar una restauración que se extendió por casi un año.
El lugar, ubicado frente a la Plaza de la República de Valdivia, fue construido en 1916 como parte de la recuperación del centro de la ciudad, afectada por un incendio. Con tres plantas y una vista privilegiada de la Catedral, fue considerado el principal centro de eventos sociales de la época.
El Club de la Unión, explica Schild -quien además es su presidente-, nació como tal en 1944, cuando los dos clubes alemanes de Valdivia, uno que agrupaba principalmente a empresarios industriales y otro de artesanos, se unieron para conformar uno solo.
Sin embargo, un año después, con la ruptura de relaciones diplomáticas con los países del Eje, Schild explica que el recinto corrió peligro. “En ese momento el Estado chileno trató de confiscar los bienes del club, por el hecho de que Alemania era enemigo”, afirma.
La acción empujó a cambiar el estatuto que obligaba a llevar las actas en alemán, lo que inhibía el ingreso de personas que no hablaban el idioma, pasando a ser leídas en castellano. “Con esta modificación se detuvo la confiscación, pues se abrió el club al resto”, dice.
Arreglos en el interior
Las mejoras hechas al Club de la Unión implicaron una inversión de $160 millones, los que se destinaron a la renovación completa del sistema eléctrico, la restauración de sus pisos, paredes, ventanales y techumbre, que aún mantienen las características decorativas de inicios del siglo XX.
Los servicios que se ofrecen van desde gastronomía hasta el arriendo de los salones. Además, se habilitó un espacio de uso gratuito para el trabajo de emprendedores. Francisco Luzzi, empresario y responsable del recinto, explica que “este club, a diferencia de otros, no cierra sus beneficios solo a los socios, sino que cualquier persona puede visitarlo, e incluso trabajar en este espacio”.
En total, el recinto dispone de 8 salones. Uno de ellos lleva por nombre Universidad Austral de Chile, por la historia que allí se escribió. “En uno de esos espacios nació la inquietud, que luego se plasmó en la fundación de la primera casa de estudios superiores del sur del país”, sostiene Schild.
Estatutos
Hasta antes de la II Guerra Mundial los documentos eran escritos en alemán.
