Publican gran libro de escultura religiosa
Por Maite Manzanares.
“Escultura Sacra Patrimonial en Santiago de Chile, siglos XVI al XX”, de Claudio Díaz, con el apoyo de la Corporación del Patrimonio Religioso y Cultural de Chile, es un completo catastro de estas obras.
Hace unos cinco años, Claudio Díaz Vial, magíster en Historia del Arte de la Universidad Adolfo Ibáñez, entró a la Basílica de la Merced, en Santiago. Le llamaron la atención las esculturas que estaban en la iglesia, y se puso a investigar sobre ellas. No había casi nada de información: los estudios se limitaban únicamente al período colonial, por lo que se decidió a hacer un catastro completo de la escultura sacra en Santiago. Esa investigación es ahora el libro “Escultura sacra patrimonial en Santiago de Chile, siglos XVI al XX”, publicado por la Corporación del Patrimonio Religioso y Cultural de Chile, acogida a la Ley de Donaciones Culturales. Se puede ver en la Biblioteca Nacional, en el Museo de Bellas Artes y en el Museo Histórico Nacional, y habrá una versión digital en Memoriachilena.cl. Es un libro de riquísima iconografía y con estudios nuevos para los siglos XIX y XX.
Marta Cruz-Coke, presidenta de la Corporación del Patrimonio Religioso y Cultural de Chile, comenta que se interesó en el libro porque es “muy novedoso para este tiempo tan ajeno a lo sacro”, y agrega que su aporte “es haber rescatado el origen, la historia, la razón de ser de estas imágenes y objetos sacros, haber devuelto y aclarado el sentido de su existencia y hacerlo accesible a un público que lo desconocía”.
Díaz reunió a un equipo de expertos, como Isabel Cruz, Fernando Guzmán y Juan Manuel Martínez, entre otros, para que aportaran desde sus conocimientos. Pero la investigación resultó un desafío, ya que mucho se ha perdido con los terremotos y varias imágenes se destruyeron por una interpretación errónea del Concilio Vaticano II, explica Díaz. La información se obtuvo de catálogos conservados por coleccionistas de revistas como Zig-Zag y de archivos de la Catedral, entre otros lugares. “Este libro amerita una segunda edición, porque ahora, ya publicado, me han llegado más datos y contactos. La idea es seguir ampliándolo, porque siempre están surgiendo segundas visiones”, señala Claudio Díaz.
