Proponen que próxima línea del Metro sea un anillo que rodee Santiago
El economista Alvaro González, plantea que Línea 7 conecte con todas las actuales vías. En ciudades como Madrid, Tokio y Berlín existen recorridos que circunvalan el territorio.
Aunque el debate sobre cómo debe ser la futura Línea 7 del Metro no se ha zanjado, sí existe una convicción compartida: deberá descongestionar la actual Línea 1, la más antigua de la red de transporte subterráneo.
Alvaro González, economista y consejero del Consejo de Políticas de Infraestructura (CPI), elaboró junto con su hija, Sofía González, ingeniera de transportes de la Universidad Católica, una propuesta para conseguir equilibrar la demanda del sistema de traslado. Se trata de un modelo circular que permitiría a la red alcanzar los 185,5 kilómetros (km), con lo cual se ubicaría entre los 15 Metros más largos del mundo.
Línea “circular”
“Esta es una línea que viene por el sur, desde el poniente se cruza a Santa Lucía, conectamos con Baquedano, luego Tobalaba y terminamos en Vitacura. Es una larga Línea 7, que se une con un el eje norte-sur que viene de Manquehue hasta Tobalaba y después se conecta con una línea oriente-poniente que va por Departamental, Las Rejas-5 de Abril”. Así describe Alvaro González la ruta que conforma un anillo y que recoge la discusión de expertos nacionales y también la experiencia internacional. “Lo interesante de las líneas circulares es que tienen demandas parejas, tienen mucho menos peak que las radiales”, señala González.
Efectivamente, en el extranjero se ha utilizado esta modalidad en ciudades como Madrid, Tokio, Moscú y Berlín. En esta última ciudad, la ruta circular transporta alrededor de 400 mil pasajeros diariamente.
“De hecho, la Línea 6 de Madrid, la circular, es la que más demanda tiene. Y en Moscú, en donde ya existe un anillo, se está evaluando hacer un segundo anillo con un radio mucho más amplio”, cuenta Sofía González, co-autora de la propuesta.
Esta nueva ruta tendría una longitud estimada de 45,5 km, con 36 estaciones, atendiendo 106 kilómetros cuadrados y un total de 11 comunas: Santiago, Estación Central, Cerrillos, Pedro Aguirre Cerda, Peñalolén, La Reina, Vitacura, entre otras.
Otra de las características de este modelo es que se propone conectar el Metro con las autopistas urbanas. “La idea es que cuando vayas por las autopistas puedas conectar con el tren subterráneo. Así generamos integración modal e integración tarifaria”, señala González.
El proyecto contempla nueve conexiones en túneles desde las autopistas urbanas hacia la red circular y otras siete desde la vialidad estructurante, que también se conecta con Metro.
El proyecto tendría un costo estimado de US$ 4.800 millones y podría ser ejecutado en 4 años. En cuanto al financiamiento, Alvaro González plantea que “esto puede ser perfectamente una concesión donde el Metro tenga la gestión de servicio y el concesionario se encarga de la obra civil ”.