Contraloría ha rechazado cuatro licitaciones de hospitales en el último mes
Organismo aclaró que en proyectos de Higueras, Barros Luco, Ñuble y Linares no hubo toma de razón.
La Contraloría ha rechazado cuatro licitaciones de hospitales en los últimos 30 días. Se trata de recintos comprometidos por el gobierno para quedar en obras a marzo de 2018.
Se trata de la tercera parte y final del Hospital Las Higueras, de Talcahuano, el diseño y construcción de los recintos de Ñuble y Linares, y la edificación del nuevo Barros Luco, en Santiago.
Además, se informó la toma de razón de cuatro proyectos: Angol, Padre Las Casas, Cochrane y Provincial Curicó, los tres últimos con alcances que deberán ser subsanados.
El órgano contralor -que publicó las resoluciones, “atendidas las múltiples consultas” y “para mayor transparencia”- declinó tomar razón tras hallar problemas de legalidad, incumplimientos de los principios de igualdad de los oferentes o porque no estuvieron sujetos a las bases del proceso. Por ejemplo, en el caso de Las Higueras, la licitación se ha rechazado dos veces, pues el administrador de contrato no contaba con los 10 años de experiencia en construcción de obras de salud requeridas en las bases.
El Ministerio de Salud (Minsal) indicó en un comunicado que ya se ingresaron a Contraloría nuevos antecedentes para subsanar el proyecto de Linares, mientras los equipos jurídicos analizan los casos de Talcahuano y Santiago. Para el recinto de Ñuble, en cambio, el Minsal informó que se declaró desierto el proceso y se iniciará una nueva licitación.
Además, la cartera destacó los logros en esta materia: “Durante el período 2014-2016 fueron tomados de razón 21 procesos licitatorios de obras hospitalarias, además de 167 en el nivel de Atención Primaria de Salud, sumando un total de 188 obras”, declaró el Minsal.
Pese a que Salud puede subsanar las objeciones, el proceso podría aplazar los tiempos impuestos para el plan de inversiones.
Carlos Piaggio, gerente de Infraestructura de la Cámara Chilena de la Construcción, dijo que “situaciones de este tipo generan un importante retraso en los proyectos. Estamos hablando de casi seis meses, ya que deben volver a licitarse para ser adjudicados. Y tratándose de hospitales, esto genera un perjuicio importante”.