Parten obras de reconstrucción en las regiones afectadas por la seguidilla de siniestros
Por S. Henríquez, J. Jerez y M. Saavedra.
O’Higgins, Maule y Biobío:
Organismos estatales y voluntarios comienzan a levantar mediaguas y la entrega de ayuda a campesinos está casi completa. Las clases, aseguran, partirían en marzo.
Aunque en el país sigue habiendo incendios forestales activos, el número de ellos y el área que afectan están lejos de la magnitud de la emergencia vivida hace algunos días. Según el último reporte de la Onemi, hay 45 incendios en desarrollo, pero todos están bajo control.
Eso sí, las huellas de la emergencia aún están presentes. Hay 7.370 damnificados y 1.624 viviendas destruidas. El tren que corre de Talca a Constitución -la única alternativa de transporte público para varios poblados- está cortado, y cerca de cuatro mil campesinos perdieron los pastos con que alimentan a su ganado.
Hay otras consecuencias también. En Biobío, dos escuelas rurales se quemaron y los alumnos debieron ser reubicados en establecimientos cercanos. En Maule, en tanto, se levanta una escuela modular para acoger a los estudiantes de un colegio de Constitución. Un escenario similar al que se vivió en la zona para el terremoto de 2010. Eso sí, la autoridad asegura que las clases partirán en marzo, de todas maneras.
En cuanto a las viviendas de emergencia, ayer se empezaron a levantar, en Tomé, las primeras 30 en la Región del Biobío. El Maule partió el proceso unos días antes y ya inició 50, mientras que la Región de O’Higgins ha entregado 22. Eso sí, según la directora de la Onemi (s) en esta última región, Josefina López, “las viviendas de emergencia no corresponden a las clásicas mediaguas, sino que son construcciones de 24 m {+2} , de mejor calidad, forradas en su interior, con instalación eléctrica y baño”.
La construcción de soluciones definitivas demorará más: se espera que el proceso de entrega comience a mediados de año.
Como la emergencia golpeó especialmente al campo, tanto Indap como particulares han llevado forraje a los criadores de animales. El ministro de Agricultura, Carlos Furche, afirmó que el 80% del forraje comprometido ya se ha entregado.
“Además de enfrentar la emergencia, esta ayuda tiene que ver con un tema de precios. Hay muchos afectados que están vendiendo su ganado, porque no tienen cómo alimentarlo, y eso baja los precios. Ahora tienen un margen para esperar”, informó.
La emergencia, eso sí, no ha terminado. Aún hay cinco comunas en alerta roja y las regiones de O’Higgins, Maule y La Araucanía, así como las provincias de Concepción y Ñuble, están en alerta amarilla.
Solidaridad
Junto con el aporte estatal a la reconstrucción, han aparecido distintas iniciativas particulares. Una de ellas se llama “Colusión de Amor”. La propuesta incentiva a las personas a donar a las víctimas de los incendios los $7 mil que recibirán como compensación por el caso de colusión de las papeleras.
Donaciones
La idea de donar a los damnificados los $7 mil con que se indemnizará a los chilenos mayores de 18 años por la colusión de papeleras suma adherentes en redes sociales. En 24 horas, una iniciativa llamada “Colusión de Amor” fue apoyada por más de dos mil personas. Profesores de escuelas rurales están preocupados por el efecto psicológico en los niñosEl 68% de los profesores consultados de escuelas rurales en Biobío y O’Higgins piensan que tras los incendios forestales que afectaron a la zona centro-sur, el principal efecto en el sector educativo es el impacto psicológico en los niños. Supera, incluso, la destrucción de sus escuelas (14%) o del entorno cercano al colegio (52%). Esto, según la encuesta del programa Puentes Educativos e implementada por la Asociación Chilena Pro-Naciones. En esta, también se consultó por los efectos más importantes en las comunas en que trabajan, ante lo cual un 55% mencionó el impacto psicológico en las familias, un 34% el daño ambiental a largo plazo, y un 31% la pérdida permanente o temporal de fuentes de trabajo.
