Creativos proyectos ayudan a reducir y reemplazar el uso de bolsas plásticas
Por Paula Leighton N.
Iniciativas ganadoras del Fondo Concursable REDUCE+:
Organizaciones comunitarias promueven ideas sustentables para limitar el daño ambiental de la basura plástica.
Cada año se usan en Chile 3.400 millones de bolsas plásticas. El 97% termina en un relleno sanitario, otras van a parar al mar, ríos y lagos.
Reducir su uso y reemplazarlo por alternativas no contaminantes es el objetivo del Fondo Concursable REDUCE+, lanzado en noviembre pasado por WWF Chile.
Los ocho proyectos ganadores del fondo -que cuenta con el patrocinio del Ministerio del Medio Ambiente y el apoyo de Walmart Chile – recibieron hasta $2 millones cada uno y comenzaron a implementarse en las últimas semanas con una creativa oferta de actividades para tomar conciencia sobre el problema e involucrar a niños y adultos en la solución.
En Chiloé, 30 mujeres de la Unión Comunal de Adultos Mayores de la Municipalidad de Quellón están recuperando la tradición de la bolsa de género que había en las casas para el pan, las verduras y los abarrotes. Como parte del taller, confeccionarán 150 bolsas de género y en marzo visitarán colegios de su comuna para contarles a los niños cómo se compraba cuando no había bolsas plásticas, y repartir las de tela. Con las técnicas aprendidas en el taller podrán luego generar ingresos haciendo bolsas para vender, dice Rodrigo Soto, coordinador del proyecto y encargado comunal de la Oficina del Adulto Mayor.
En la II Región, los impulsores del proyecto Taltal 4R -a cargo de la Escuela de Inglés EFTG- instalaron tres puntos de recolección de bolsas plásticas, incentivaron a un supermercado y una librería a premiar a los clientes que rechacen usar bolsas plásticas y han organizado dos campañas de limpieza de playas y talleres de fabricación de bolsas reutilizables usando poleras viejas y termofusión de plástico, enumera Héctor Tello, director de la escuela y encargado del proyecto.
En Puerto Montt, en tanto, la Fundación EcoSueños, lleva adelante el proyecto “Angelmó libre de bolsas plásticas”, que ha logrado que el 90% de los locatarios de la feria artesanal hayan reemplazado las bolsas plásticas por otras de papel kraft y de papel de diario, dice Álvaro Luna, coordinador de la iniciativa. Para visibilizar el impacto de las bolsas plásticas en el borde costero, en el Canal de Tenglo también están trabajando con lancheros y tienen dos puestos de información al público.
Los demás proyectos incluyen un juego que la ONG Saberes llevará a las playas de Punta de Tralca, Chépica, El Quisco y Las Cruces, para que los niños, disfrazados de peces y tortugas de mar, perciban cómo los desechos plásticos afectan a la fauna marina. Además, se agregan tres proyectos de fabricación de bolsas reutilizables en el “barrio de las telas” (Independencia), en la Caleta de Llico (Región del Maule) y en Chiloé, a lo que se suma una campaña en el Paso Internacional Cardenal Samoré y el Parque Nacional Puyehue, para minimizar el uso de bolsas plásticas.
