Lluvias dejan superávit de agua caída en el sur, y la zona central enfrenta nueva ola de calor
Por Óscar Riquelme y J.J. Moreno.
Últimas precipitaciones se han sentido con fuerza entre La Araucanía y Los Lagos:
Desde Temuco a Puerto Montt la situación contrasta con el fuerte déficit que mostraban a igual fecha de 2016.
Mientras a igual fecha del año pasado el país vivía una de las peores sequías del último tiempo desde Biobío al sur, la situación que enfrentan esas regiones hoy es diametralmente opuesta gracias a las intensas lluvias que desde fines de la semana pasada y hasta inicios de esta se dejaron sentir entre Temuco y Puerto Montt.
Según la Dirección Meteorológica de Chile, si a esta fecha el año pasado habían caído en Temuco 17,4 mm de lluvia y en Puerto Montt 35,2 mm, este año en la primera ya se registran 79,8 mm y en la segunda 188,8 mm (ver recuadro).
La intensidad de estas precipitaciones -como las que se acostumbran sentir en pleno invierno- generó serios inconvenientes, principalmente en la Región de Los Lagos.
Allí, aludes de arena, rocas y palos obstaculizaron la carretera hacia los Saltos del Petrohué, recinto que debió permanecer cerrado durante tres días y fue reabierto a las 9 horas de ayer. En Osorno hubo anegamientos de calles, como el acceso al puente San Pedro, y en la Carretera Austral la ruta se anegó completamente en la comuna de Hualaihué, dejando aisladas por 24 horas a cientos de familias.
Para Robert Brümmer, académico del Instituto de Ciencias de la Tierra de la Universidad Austral, estadísticamente estas precipitaciones son normales, “porque cada cierta cantidad de años tenemos estos escenarios”. Lo que fue anormal, precisó, “fueron los últimos veranos que fueron bastante calurosos y secos”.
Raúl Fuentes, de la Dirección Meteorológica de Chile, agregó que “al analizar los años 2015 y 2016, se puede inferir un déficit importante en las precipitaciones, lo que conllevó, por ejemplo, a elevadas temperaturas principalmente en 2015, lo que se tradujo en importantes incendios forestales en Conguillío y la reserva nacional China Muerta”.
Con todo, este superávit no se extiende hacia el norte, dado que desde Valparaíso hasta Concepción el déficit de agua caída se mantiene en los mismos términos. En la primera ciudad el déficit alcanza al 100%, mientras que en la segunda llega a -62%. En el Maule y Biobío mantienen -23% y -37%, respectivamente.
De hecho, las regiones de la zona central están viviendo la realidad opuesta: El martes, por ejemplo, los chillanejos debieron soportar una máxima de 35 °C y el peak se sintió en la comuna de Quillón, donde el termómetro anotó 37,9 °C.
Las altas temperaturas no darán tregua ante la llegada de una nueva ola de calor entre Biobío y Los Ríos, que comenzó a sentirse ayer y durará hasta el fin de semana. El meteorólogo Roberto Osorio explicó que este fenómeno se debe a una masa de aire cálido de origen tropical, que se está desplazando desde la zona central hacia el centro sur.
Por ello, Osorio adelantó que mientras las temperaturas desde Valparaíso hasta el Maule deberían descender, entre La Araucanía y Los Ríos el calor sobre los 30 °C se mantendrá hasta el viernes. Con todo, en el caso del Biobío las condiciones de calor no deberían durar más allá de fines de este mes y, en ningún caso, superarán el calor vivido entre el 17 y 28 de enero, cuando los incendios forestales se presentaron en su mayor magnitud en las regiones de O’Higgins, Maule y Biobío.
PRONÓSTICO
Los próximos 5 días los cielos de Temuco a Puerto Montt se mantendrán con leve nubosidad y altas temperaturas. Extremo norte con nieve, fuertes vientos, tormentas eléctricas y se esperan precipitaciones en la costaLluvias, fuertes vientos, tormentas eléctricas y hasta nieve ha habido en las últimas horas en sectores precordilleranos y cordilleranos de las regiones del extremo norte. Aunque la Dirección Meteorológica extendió su pronóstico de mal tiempo hasta el fin de semana, los pasos fronterizos estaban abiertos.
La Onemi mantiene vigente una alerta temprana preventiva para comunas precordilleranas como San Pedro de Atacama, Calama y Ollagüe, a las que se sumaron Sierra Gorda y María Elena, ambas en pleno desierto, y también la costera Antofagasta.
Más al norte, en Arica, ayer la alerta pasó a amarilla para sus cuatro comunas, incluyendo las costeras, por posibles precipitaciones. El río San José, seco casi todo el año y que cruza en un tramo de 4 km por el radio urbano de Arica antes de desembocar en la bahía, registra su tercera bajada de este año.
“Un equipo de fiscalizadores tomó muestras en las aguas de la desembocadura para constatar si son seguras para el uso recreacional. Recomendamos a la población evitar el baño y la práctica de actividades acuáticas”, dijo Francisco Rojas, seremi (s) de Salud.